La carrera mundial por las vacunas comenzó a finales de 2020 con toda la intensidad que se esperaba, a raíz de los deseos de los Estados por adquirir la mayor cantidad posible de dosis para inmunizar a la mayor cantidad de personas en el plazo más corto de tiempo.
En ese contexto, Reino Unido saca ventaja sobre sus pares de Europa -y por supuesto de todo el mundo- ya que se aseguró alrededor de 367 millones de dosis y el 13% de su población adulta recibió al menos una inyección, mientras que en el resto del continente esa cifra promedia el 2%.
Ante esta situación, el diario británico The Times informó a partir de una fuente de la industria farmaceútica que el país podría donar vacunas a países que se encuentren rezagados.
Desde que comenzaron los planes de vacunación, entre los últimos días de 2020 y los primeros de 2021, los laboratorios encontraron enormes problemas para cumplir con la distribuición acordada previamente.
La tensión más grande en estos momentos se produce con Aztrazeneca y Pfizer, las dos mayores fabricantes. La Unión Europea acusa a la primera de incumplir un contrato por 400 millones de dosis.
AstraZeneca habría informado que solo puede administrar una cuarta parte de los 100 millones de dosis que Bruselas esperaba en el primer trimestre, según afirmó un funcionario de la UE.
El bloque amenazó en las últimas horas con restringir la exportación de vacunas que se produzcan en su territorio, lo que provocaría un conflicto con el Reino Unido, pero también advirtieron por la posibilidad de intervenir las compañías. obligarlas a subcontratar a otros laboratorios para elaborar el producto o en última instancia exigirles que liberen los conocimientos y la propiedad intelectual.
Argentina atraviesa una situación similar con las dosis de la vacuna Sputnik V, ya que Rusia reconoció demoras para producir las dosis necesarias para cumplir con las 5 millones prometidas para enero.
A pesar de eso, el Instituto Gamaleya confirmó que no se cortará el envío, aunque sí se reducirá entre dos y tres semanas. En un comunicado publicado el miércoles, reconocieron que como Argentina «ha sido uno de los primeros países en aprobar Sputnik V y con quien hemos establecido una sólida alianza, seguirá recibiendo la vacuna».