Cuando se habla de la eliminación del Estado y de los “gastos” que genera, claramente se hace desde una visión sesgada y mal intencionada porque su intervención es lo contrario de la meritocracia, es tener como objetivo principal garantizar el bienestar de la ciudadanía en general y posibilitar la movilidad social ascendente que es generar más y mejores oportunidades, garantizar la aplicación y ampliación de derechos, la prestación de servicios esenciales, especialmente a aquellas personas que de otra manera no podrían acceder a ellos.
Es de a través del Gobierno de la Provincia, por decisión del gobernador, Ricardo Quintela, que se posibilitó que el joven riojano Luciano Barbero que sufrió un grave accidente en México, sea trasladado en un avión sanitario de manera gratuita algo que que no hubiera podido realizar su familia, costeándolo con sus recursos.
Además, hay que aclarar que la salud en Mexico es pública pero paga, por lo que desde el día que se accidentó tiene que abonar por su atención, en cambio, en Argentina cuenta con la posibilidad de contar con atención de calidad sin tener que pagar absolutamente nada.
Acciones cómo estas, demuestran en primer lugar, el corazón sensible de un gobernante como Quintela que fue el que inició las gestiones para que el traslado de Mexico hacia esta provincia sea posible sino también de la importancia de un Estado presente que vela porque sus habitantes tengan el acceso al servicios de salud sin discriminación de ningún tipo y sin sufrir dificultades financieras.