El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, cumplió hoy 81 años, en momentos en que sondeos muestran que su edad puede complicar su futuro político, si bien sostiene que quiere otro mandato en la Casa Blanca y retirarse de la primera línea política con más de 86 años.
Biden celebrará su cumpleaños con un festejo íntimo, que incluirá la tradición del indulto anual del pavo antes del Día de Acción de Gracias, que se celebra los 23 de noviembre, y durante toda la jornada recibirá información de sus asesores en seguridad nacional sobre las crisis globales, informó la cadena CNN.
El líder demócrata, exvicepresidente y senador durante décadas, se convirtió en 2021 en el presidente de más edad en sentarse en el Despacho Oval, superando a Ronald Reagan, el expresidente republicano que ocupó la Casa Blanca entre 1981 y 1989, y que tenía 77 años al finalizar su segundo mandato.
Biden confirmó en abril que buscará su reelección en los comicios de noviembre de 2024, y, en caso de lograrlo, cerraría su segundo período presidencial con 86 años y rompería el récord que él mismo había instaurado.
Tres de cada cuatro estadounidenses coinciden en que es demasiado mayor para seguir cuatro años más en la Casa Blanca, según un sondeo publicado en septiembre por el diario The Washington Post y la cadena ABC News y que reflejaba una subida de seis puntos con respecto a los datos de mayo, informó la agencia de noticias Europa Press.
Biden, consciente de que el debate está sobre la mesa, ha recurrido a la ironía en varias de sus declaraciones públicas, como cuando en septiembre afirmó: «En los 800 años que llevo, nunca he sido más optimista sobre el futuro del país».
«Sé que tengo 198 años», dijo en junio en otro acto, en un intento por llevarse a su terreno lo que podría ser un lastre.
Tanto él como su entorno han tratado además de resaltar que la edad implica también experiencia, de hecho, Biden llegó a Washington como senador hace ya 50 años.
«Una de las cosas que vienen con la edad, por suerte, es la sabiduría», señaló el presidente en otra de sus alusiones a este tema.
A su favor juega que se mueve en un entorno político marcadamente envejecido.
Su principal rival, el republicano Donald Trump, cumplió en junio 77 años, aunque el magnate no ha dudado en burlarse públicamente de la edad de Biden y de poner en duda su capacidad para seguir en el poder.
Un 50% de los estadounidenses creen que también Trump es demasiado mayor.
El debate en torno a la longevidad política de algunos dirigentes se ha hecho especialmente acuciante en el Congreso, especialmente después de la muerte de la senadora Dianne Feinstein con 90 años y de los evidentes síntomas de debilidad mostrados por el líder republicano en la Cámara Alta, Mitch McConnell.
(Télam)