El inicio de «Most Wanted Tour» está dando de qué hablar.
La apertura de la nueva gira de Bad Bunny está generando polémica. Mientras algunos consideran que se trata de un hecho «legendario», otros están rechazando la decisión del cantante, e incluso, acusándolo de maltrato animal ¿Qué fue lo que hizo el Conejo Malo? Abrir su concierto montado a un caballo.
«Mi sueño es entrar a un show montado a un caballo», había confesado el puertorriqueño años atrás en una entrevista promocional de su anterior álbum, «Un verano sin tí». Ahora, logró llevar adelante su anhelo, pero no se salvó de las críticas.
Primero, apenas se viralizaron las imágenes de «Most Wanted Tour», fueron los internautas quienes comenzaron a cuestionar a Bad Bunny por haber expuesto al animal. Rápidamente, algunas organizaciones protectoras de animales se hicieron eco del escándalo y reaccionaron.
Una de ellas fue Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA), quien repudió el hecho y lo tildó de irresponsable. «Por favor, no incluyan animales en sus espectáculos. Quieren vivir en paz, y no ser usados para tu espectáculo», reclamaron.
«No «estamos bien» con este acto irresponsable. @badbunnypr, ¿Por qué pensaste que era una buena idea exponer a un caballo al ruido, luces, niebla y gritos de miles de personas? El caballo parece estresado y claramente NO QUIERE ESTAR AHÍ», escribieron en redes sociales al compartir un video del momento.
Luego del descargo en redes, fue Lisa Lange, la Vicepresidenta Senior de PETA Estados Unidos, quien tomó la palabra y brindó más detalles sobre el peligro que representa exponer a un caballo a este tipo de situaciones.
«Son muy asustadizos, y no son accesorios para ser montados en un escenario entre luces intermitentes, música atronadora y multitudes ruidosas. Como se asustan con facilidad, esto podría haber acabado en tragedia, todo por un truco absurdo e irreflexivo”, manifestó en una entrevista para Newsweek.
FANÁTICOS DIVIDIDOS POR LA ACTITUD DE BAD BUNNY
Muchos fanáticos, a pesar de su admiración, criticaron a Bad Bunny por haber realizado este acto y pidieron, por favor, que lo abandonara de cara al resto de fechas del tour que girará, de momento, por diversas ciudades de Estados Unidos.
Sin embargo, algunos otros defendieron al artista, explicando que «seguramente el caballo tenía tapones de oídos». Además, consideran que se trata de una entrada «legendaria» y «revolucionaria» para la música y los shows en vivo.