Prematuro adiós tuvo el argentino Renzo Olivo en el torneo Challenger de Santiago, en Chile, donde quedó descalificado en primera ronda.
El tenista ubicado en el puesto 286° del ranking enfrentaba al brasileño Orlando Luz (373°) en la primera ronda cuando explotó de furia por una decisión del juez de silla.
El rosarino, quien perdía por 6-3 y 2-1, estaba quedó break-point abajo en el tercer game de ese set, sacó y fue a la red a ejecutar una volea, momento en el que el árbitro dictaminó «touch», es decir toque a la red, lo que significaba para el argentino la pérdida del punto y su servicio.
La primera reacción del argentino fue gritar «noooo», luego arrojó al piso la raqueta, se mostró muy enojado y trató de «ladrón» al umpire.
Tras recibir dos advertencias por «conducta antideportiva», Olivo, pateó la silla del juez y rompió un cartel de publicidad.
A raíz de ello, fue descalificado por el supervisor del torneo, Ricardo Reis.
A la espera de una multa que podría llegar hasta los 10.000 dólares, el rosarino tampoco podrá jugar en dobles.
Precisamente, Renzo venía de ser campeón en dobles en el Challenger de Santa Cruz de la Sierra, junto al zurdo Andrea Collarini.