En un momento crucial para el Partido Justicialista (PJ), la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner recibirá esta tarde al gobernador bonaerense Axel Kicillof en su departamento de Recoleta. Este encuentro, que llega tras la presentación de los avales de CFK como candidata a presidir el PJ Nacional, busca limar las tensiones internas que han marcado las últimas semanas dentro del kirchnerismo.
La reunión Cristina-Kicillof: un intento por pacificar las aguas
El cara a cara entre Cristina y Kicillof se produce pocos días antes del Día de la Lealtad, donde el gobernador tiene previsto encabezar un acto en solitario. Este gesto ha sido interpretado por algunos como una muestra de la creciente independencia de Kicillof respecto a La Cámpora y Cristina Kirchner, lo que ha generado roces internos.
Según trascendió, el encuentro tiene el objetivo de calmar los ánimos y fortalecer la unidad en un momento en que las tensiones subterráneas entre Kicillof y Máximo Kirchner han salido a la luz. Un episodio clave ocurrió en septiembre, cuando en un acto de La Cámpora, los militantes entonaron una canción dirigida al gobernador en la que le reclamaban mayor alineamiento con el liderazgo del espacio.
La CGT fija su postura y pide dejar atrás los personalismos
Ranking de gobernadores e intendentes los mejores y peores de octubre
Ranking de gobernadores e intendentes: los mejores y peores de octubre
Horas antes de la reunión, la Confederación General del Trabajo (CGT) emitió un comunicado en el que instó al PJ a «superar los personalismos» y apostar por una renovación genuina dentro del partido. En su mensaje, titulado «Recuperar lo mejor de nuestra tradición justicialista», la central obrera subrayó la importancia de unificar esfuerzos para reconstruir la confianza ciudadana, destacando que «solo con nombres propios no alcanza».
Este pronunciamiento de la CGT se enmarca en la disputa por la presidencia del PJ, donde, además de Cristina, el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, se perfila como otro posible contendiente. Sin embargo, el llamado de la CGT apunta a evitar divisiones internas que debiliten al peronismo en un momento clave para su futuro.
¿Qué hay en juego?
La reunión entre Cristina y Kicillof no solo tiene relevancia en términos de la interna del PJ, sino que también marcará el tono de las celebraciones por el Día de la Lealtad, una fecha histórica para el peronismo. Con solo cuatro días restantes para la presentación de listas de candidatos a la conducción del PJ, el encuentro adquiere una trascendencia mayor, especialmente en un contexto donde la centralidad del movimiento se disputa entre sus distintas facciones.
La CGT, por su parte, dejó claro en su comunicado que «la recuperación política de un justicialismo con voluntad transformadora» debe incluir a todos los sectores afines al movimiento, con el movimiento obrero como columna vertebral.