El accidente ocurrió cerca de Tabas, en el centro del país, en una línea que une las ciudades de Mashhad y Yazd. El ministro de Carreteras y Desarrollo Urbano, Rostam Ghasemi, pidió disculpas a los iraníes y dijo que su cartera era responsable del incidente.
Al menos 21 personas murieron y decenas resultaron heridas hoy al descarrilar un tren tras chocar con una excavadora junto a la vía cerca de Tabas, en el centro de Irán, en una línea que une las ciudades de Mashhad y Yazd, se informó oficialmente
«Veintiún personas murieron en el accidente», afirmó el jefe de los servicios de emergencia de la provincia de Yazd, Ahmad Dehghan, citado por la televisión estatal IRIB.
Las autoridades informaron que 24 ambulancias y tres helicópteros fueron enviados al lugar para asistir a las víctimas del accidente que tuvo lugar a las 5.30 hora local (22 de anoche en Argentina), según reportó la agencia AFP.
«El balance de muertos seguramente aumentará porque hay varios heridos en estado crítico», indicó el portavoz del servicio nacional de rescate, Mojtaba Khaledi, citado por la televisión estatal.
El balance anterior indicaba que había al menos 17 fallecidos y otras 37 personas habían sido trasladadas al hospital.
Imágenes difundidas por la agencia ISNA muestran un vagón volcado en la vía y otros cuatro encastrados unos encima de los otros, y una excavadora amarilla en un lateral de la vía.
El subdirector de los ferrocarriles estatales iraníes, Mir Hassan Moussavi, indicó a la emisora que el tren llevaba 348 pasajeros.
«Descarriló tras impactar con una excavadora» que estaba cerca de la vía, señaló.
Cinco de los once vagones del convoy se salieron de la vía, explicaron los servicios de emergencia.
El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, presentó sus condolencias a las familias de los fallecidos y dio órdenes de acelerar la investigación de las causas del accidente, según su oficina.
Por su parte, a través de una publicación en Twitter, el ministro de Carreteras y Desarrollo Urbano, Rostam Ghasemi, pidió disculpas a los iraníes y dijo que su cartera era responsable del incidente.
El fiscal de Tabas visitó el lugar de los hechos mientras se iniciaba una investigación judicial, informaron los medios iraníes.
El descarrilamiento se produce después de que el mes pasado se derrumbara un bloque de pisos en el suroeste de Irán y murieran al menos 43 personas.
En 2016, dos trenes chocaron y se incendiaron en el norte de Irán, matando a 44 personas e hiriendo a decenas.
El entonces jefe de los ferrocarriles iraníes dimitió después de que cuatro de sus empleados fueran detenidos tras la colisión en la línea principal entre Teherán y Mashhad, la segunda ciudad del país.
Fuente: Télam