Desde julio de 2021, Amal, una marioneta de 3.60 metros que simboliza a una niña refugiada siria, recorre el planeta con su mensaje de amor. Ya fue recibida por el Papa, visitó Ucrania y Polonia para apoyar a los migrantes y desde la semana pasada está en Nueva York. Según Unicef, son 37 millones los niños y las niñas lejos de su hogar en todo mundo.
Con los 3,60 metros de altura que alcanza con sus largos zancos, la marioneta Amal representa a una niña refugiada siria de 10 años que tiene la esperanza de volver a su tierra y en paz para reencontrarse con su madre. Precisamente, Amal signifiica «Esperanza» en árabe y es la que está llevando a lo largo de más de 8 mil kilómetros, tres continenentes, una docena de países y 80 ciudades. La última escala es Nueva York donde estará hasta comienzos de octubre.
Amal es la pieza fundamental de un emprendimiento teatral itinerante para concientizar sobre los millones de menores refugiados que actualmente hay en el mundo: el proyecto «The Walk» («El Camino»), creado por la compañía de teatro Good Chance.
De acuerdo a cifras de Unicef, son 37 millones los niños y niñas que tuvieron que dejar sus hogares, de los cuales, entre 700 mil y un millón fueron echados por la guerra en Siria.
La marioneta, que es manejada por cuatro personas y tiene una estructura de bambú, comenzó su peregrinaje hace 14 meses en Turquía, en Gaziantep, a 64 kilómetros de la frontera con Siria, donde se radicaron cientos de reugiados sirios. Luego viajó a Grecia donde más que adhesiones recibió repudios, tal vez porque hay gran oposición de sectores de la derecha griega a los campos de refugiados, como los de la isla de Lesbos.
Quien sí le brindió todo su apoyo fue el papa Francisco, cuando Amal, en septiembre, llegó a Roma. En la colmada Plaza San Pedro, el pontífice la bendijo y le deseó lo mejor para su mensaje de paz. Francisco es una de las personalidades que más implora por los refugiados, al punto que su pimer viaje como papa fue a la isla de Lampedusa, en el sur de Italia, a solidarizarse con los refugiados que cruzan el Mediterráneo en precarias balsas.
Luego Amal atravesó Francia y en noviembre arribó a Reino Unido. El mayor acto -ya hizo casi 200 en su periplo- fue en Manchester. Ante unas diez mil personas en el Castlefield Bowl, un estadio abierto para grandes recitales, la marioneta tuvo el sueño de reencontrarse con su madre.
El mundo cambió en los siguientes seis meses. El 24 de febrero de 2022 Rusia invadió Ucrania y un nuevo grupo de refugiados apareció en el mapa europeo. Amal no podía estar ajena y viajó a la ciudad ucraniana de Leópolis y a refugios de migrantes en Polonia.
Finalmente desde este miércoles 13 de septiembre, la marioneta siria está en Nueva York y durante más de dos semanas recorrerá los principales distritos de la ciudad, com Queens, Manhattan y Brooklyn.
En la más cosmopolita de las urbes del mundo, Amal sigue difundiendo su mensaje de amor. Un mensaje que mantendrá su vigencia mientras en el mundo haya un niño o una niña alejada de sus padres.
Fuente: Télam