El Presidente dijo que «garantizar que la derecha no vuelva a Argentina, fundamentalmente por el bienestar del pueblo, es un deber que tenemos todos en nuestro espacio». Señaló que no esta en sus manos levantar las PASO y negó la falta de diálogo con Cristina.
El presidente Alberto Fernández aseguró que nadie puede acusarlo de «hacer una aventura personal» en términos políticos, afirmó que «no encuentra en la Teoría del Delito» cómo la vicepresidenta Cristina Fernández «puede ser condenada» en la causa conocida como Vialidad y exhortó al Congreso a que «trate la ley de Renta Inesperada».
El mandatario sostuvo que «como Estado tenemos que hacer un esfuerzo para bajar paulatinamente» la inflación y señaló que «los empresarios tienen que hacer el suyo».
«A los trabajadores es poco el esfuerzo que le tenemos que pedir», añadió el Presidente en una entrevista con FM Futurock.
En esa línea, insistió en que «necesitamos resolver el tema inflacionario» y consideró que pese a ser un tema «muy difícil» por la suba de precios en el contexto de la guerra de Rusia con Ucrania, «hay que encontrar una solución».
A la vez, ponderó la gestión del ministro de Economía, Sergio Massa, a quien dijo tenerle «mucha confianza» por haber logrado «tranquilizar la economía con rigor y sensatez económica».
Sobre la posibilidad de que el Gobierno otorgue un bono extraordinario, aseguró que «estamos estudiando el tema con cuidado» pero aclaró que aún «no tomamos definiciones» al respecto.
De esa manera, señaló que comparte la mirada de la vicepresidenta Cristina Fernández sobre el tema y aseguró que «hay que recomponer los ingresos más bajos».
«Por eso yo pido que las paritarias le ganen a la inflación», bregó.
En esa línea, instó a «ordenar las cuentas públicas» y «los abusos de muchos empresarios», y analizó que una «devaluación brusca es empobrecer a la gente y eso no lo queremos hacer».
La globalización en debate
«La globalización entró en debate, la OTAN que estaba moribunda con (Donald) Trump, renace y se fortalece con el tema Ucrania», evaluó el Presidente sobre la coyuntura internacional.
En tanto, aseguró que «avanzamos muchísimo» en materia de integración con la reciente reunión Unión Europea-Celac y exhortó a «unir» la región de América Latina y el Caribe.
Además, llamó a «darle institucionalidad a la Celac» y convocó a generar «normas que empiecen a regir a todos los países de la región» para emular el funcionamiento de la Unión Europea.
«Cuando en Europa hay problemas, Europa va en socorro del que tiene problemas. No lo deja solo», analizó.
En tanto, advirtió que «tenemos una gran oportunidad como región» y aseguró que los países latinoamericanos «podemos ser muy buenos productores de alimentos», al recordar que uno de los temas del G20 «es seguridad alimentaria».
De esa manera, pidió «que el Congreso se ponga de acuerdo en avanzar con la ley de Agroindustria».
«América Latina tiene todo lo que el mundo puede demandar. Tenemos que producir alimentos, por eso estoy pidiendo que el Congreso se ponga de acuerdo para avanzar con la ley de Agroindustria»
«Teniendo a México, a Brasil y a Argentina alineados en un destino común es mucho más fácil concretar esos objetivos. Es una gran oportunidad que tenemos para que eso de mediano o largo plazo tenga un impulso más fuerte y sólido», planteó.
La herramienta de las PASO
Al ser consultado por las elecciones presidenciales de 2023, Fernández aseguró que «garantizar que la derecha no vuelva a Argentina, fundamentalmente por el bienestar del pueblo, es un deber que tenemos todos en nuestro espacio», y remarcó que el Frente de Todos (FdT) «no es de 3 o 4 dirigentes».
«Garantizar que la derecha no vuelva a Argentina, fundamentalmente por el bienestar del pueblo, es un deber que tenemos todos en nuestro espacio»
Además, señaló que «Perón alguna vez nos enseñó que cuando un compañero habla mal de otro compañero, empieza a dejar de ser peronista» y sostuvo que «nadie ha hecho más por la unidad que yo».
«Me pueden acusar de cualquier cosa pero no me pueden acusar de hacer una aventura personal», apuntó, y a su vez, explicó que no cree «en los personalismos», al ser consultado por las definiciones del diputado Máximo Kirchner del sábado último.
Por su parte, destacó que fue «el único presidente» que gobernó con una pandemia y con el desarrollo de un conflicto bélico y exhortó a la sociedad a «entender el contexto general en el que vivimos».
En cuanto a las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias» (PASO), aseveró que «no está en sus manos levantar o seguir» con esa instancia electoral, a la que definió como un «hallazgo» de la gestión de Fernández de Kirchner que «permitió democratizar los espacios políticos».
«Es un tema del Congreso, los temas electorales le corresponden al Congreso», afirmó sobre una posible cambio de la normativa y explicó que «la reforma de temas electorales necesita una mayoría calificada; no pierdan tiempo hablando conmigo».
Asimismo, sostuvo que tiene la «decisión» de que el FdT «gane las elecciones de 2023» y afirmó que «después discutiremos quién es el mejor candidato».
En ese sentido consideró que «la mejor forma es con la gente votando».
«Terminé siendo presidente porque se pensó que era el que tenía más capacidad para articular la unidad», analizó.
En esa línea, afirmó que «tenía mucha razón Cristina» en la elección de su candidatura presidencial en 2019, ya que, consideró, «la urgencia era que el país gire» y para eso «teníamos que unir fuerzas».
Sobre la coalición de Gobierno, afirmó que «cada uno hizo lo mejor posible», y si bien admitió que «puede haber habido diferencias», concluyó que «en los grandes temas» no las hubo.
«Las diferencias afloraron con el FMI y la historia dirá quién tiene razón», explicó, y evaluó que «si no hubiéramos hecho ese acuerdo tendríamos que haber pagado 19 mil millones este año y hubiéramos caído en default en el medio de la guerra».
«Sigo esperando que el Congreso trate la ley de la renta inesperada», reiteró sobre el proyecto que presentó en junio pasado y explicó que como consecuencia «del aumento de alimentos y de la energía» muchos sectores tuvieron una ganancia inesperada.
«Esa mayor ganancia» coyuntural «debe tributar al Estado», consideró, y señaló que, de esa manera, «tendremos recursos para distribuir mejor».
En esa línea, argumentó que bajo «la lógica de distribuir el ingreso» esa ley «se discute» en muchos países, entre los que destacó a España, Alemania, Italia, Francia y Estados Unidos.
«Le pedí a Cecilia Moreau y Sergio Massa también que revean el tema y si hay que modificar algo lo hacemos, pero hay que hacerlo», confió.
Consultado sobre el juicio que se le sigue a la vicepresidenta en la causa conocida como Vialidad, sostuvo que «no encuentra en Teoría del Delito» cómo Fernández de Kirchner «puede ser acusada y condenada por un caso así».
«Confío que alguna vez la Justicia alguna vez entienda lo que está pasando», dijo y admitió que si la mandataria fuera condenada «descreería mucho» del Poder Judicial.
En cuanto a su gestión, destacó que como presidente trabajó «con total honestidad» y destacó que «el día que me tenga que ir me iré los mismos bienes» que al inicio de su mandato.
A la vez, recalcó que será el mandatario con «mayores obras públicas», y dentro de ellas, ponderó la realización del gasoducto Néstor Kirchner.
«Antes de irme va a estar funcionando y eso nos va a dar la soberanía de no necesitar gas importado, nos va a permitir estar a un paso más hacia la autosuficiencia», concluyó.
Fuente: Télam