Aunque recibió el beneficio de la prisión domiciliaria por esta causa, el ex secretario de Transporte no puede salir del penal de Ezeiza porque está siendo juzgado por otros hechos de corrupción. Está preso desde 2016.
Ricardo Jaime está preso desde el 2 de abril de 2016. Sigue tras las rejas porque le rechazaron todos los recursos que su defensa presentó para lograr la prisión domiciliaria mientras es investigado por diferentes casos de corrupción de su paso por la administración pública, durante la primera etapa del kirchnerismo. Pero es, además, el único detenido de los que fueron juzgados por la tragedia de Once, de la que se cumplen 11 años.
El 22 de febrero del 2012, a las 8.33, el tren número 3772 de la Línea Sarmiento, operada por Trenes de Buenos Aires (TBA), no detuvo su marcha cuando estaba arribando a la estación terminal Once y chocó con los paragolpes de contención de la plataforma número 2, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La Tragedia de Once le costó la vida de 52 personas (una de ellas era una mujer embarazada) y dejó un tendal de 789 heridos.
Era el primer día laborable tras el feriado de Carnaval. Más de 1.200 pasajeros del tren Sarmiento ya tenían bolsos, carteras y maletines en la mano para salir del tren y seguir cada uno a lo suyo, en plena hora pico. Pero no pudo ser.
Los primeros tres coches del tren, identificado con la chapa 16, se aplastaron entre sí, quedando cada uno de ellos incrustado en el anterior. El impacto fue tal que el resto de los pasajeros creyó que el tren había explotado y que la onda expansiva había roto los vidrios de todos los vagones restantes.
Casi todos los que murieron estaban en los dos primeros coches, repletos con la gente que se había amuchado para descender primero. Dos helicópteros, 110 ambulancias públicas, otras varias de empresas privadas, centenares de policías y numerosas dotaciones de bomberos participaron en el rescate de víctimas. El conductor del tren, Marcos Córdoba, fue milagrosamente rescatado con vida, pero herido en las piernas. Apenas se los pudo liberar del enjambre de fierros, doscientos heridos fueron llevados a 13 hospitales de la ciudad de Buenos Aires.