El presidente destacó que se irá del gobierno «con el mismo patrimonio» con el que llegó y que no tiene «cuentas ni testaferros ni nada en el exterior», al igual que sus funcionarios. Habló sobre las cuentas pendientes de su gestión, criticó la gestión de Mauricio Macri y habló sobre su relación con Cristina Fernández.
El presidente Alberto Fernández afirmó que su gobierno fue uno de los períodos en los cuales «más obras públicas se ejecutaron», consideró que «el peronismo «debe abrir un debate interno» para definir su futuro y afirmó que «la alternancia es buena para el país, al conceder una entrevista con El Observador, un medio digital de Uruguay.
«Hicimos 7.000 obras públicas de las cuales empezamos y terminamos 4.000, y 14.0000 viviendas y no hay una denuncia de corrupción. Es uno de los períodos de goberno en los cuales más obras se ejecutaron», señaló Fernández.
Fernández afirmó que dejará el Gobierno el 10 de diciembre sin haber sido denunciado por corrupción y enfatizó que se irá a con el «mismo patrimonio» con el que ingresó hace cuatro años a la Casa Rosada.
«Soy un Presidente que nunca fui denunciado por corrupción y que además dejo el Gobierno con el mismo patrimonio con el que entré. No tengo cuentas ni testaferros ni nada en el exterior, al igual que los funcionarios de mi Gobierno».
Acerca del futuro del peronismo, evaluó que «tenemos que abrir un debate interno sobre cómo debemos ser en adelante, y calificó como una «mentira» que alguna figura de la coalición del Frente de Todos (FdT) «no haya sido escuchada» durante su gestión.
«Acá no es que en la coalición alguien no haya sido escuchado. Eso es mentira. Lo que es verdad es que alguien no fue obedecido. Pero hay momentos en que un Presidente decide y en verdad es el Presidente quien no debe obediencia a nadie. Por un lado me piden que sea obediente y por otro lado me piden que tenga la lapicera. Cuando la lapicera firma algo que no les gusta se convierte en un ser objeto de crítica», observó el jefe de Estado.
En ese sentido, Fernández afirmó que «los medios argentinos decían que yo era un títere y resulta que el títere es el único que resulta enfrentado a (la vicepresidenta) Cristina» (Fernández de Kirchner)».
«Con lo cual muy títere no era, ése era el problema y la que queja de que ‘no me escuchan’. Escuché, me dijeron cosas por escrito y tuits. Lo que pasa es que no siempre estoy de acuerdo», subrayó.
En paralelo, expresó que «la verdad» él «quería que la Argentina subiera la vara a un montón de cosas».
Acerca de si está «preparado» para dejar la Presidencia, Fernández respondió: «Es la democracia así debe ser la democracia. Yo me hice cargo del poder. El poder se ejerce. simplemente se ejerce».
«Valoro mucho la democracia y creo que también le hace bien al país la alternancia. En esta gestión hemos tenido muchas dificultades para combatir la inflación. Pero en otras épocas, cuando apareció un plan que contuvo la inflación, se generó pobreza y una cantidad de desempleo incalculable. Ese plan terminó con un estallido social en democracia que fue el del 2001», recordó el jefe de Estado.
Asimismo, al trazar un panorama de la presidencia de Mauricio Macri, entre 2015 y 2019, apuntó que fue de una «fuerte endeudamiento y desequilibrio inflacionario» que trabajó como «resultado pobreza».
Fernández también mencionó que recibió un «un país donde los espías del Estado escuchaban conversaciones, hasta el día de hoy lo vemos, e inventaban causas y todo eso lo terminé».
Más adelante, aseveró que dejó a la «justicia que funcione libremente», pero recalcó que «la critiqué mucho porque es un poder que no funciona bien en Argentina».
Acerca de la causa judicial por enriquecimiento ilícito que involucra al ex jefe de Gabinete bonaerense, Martín Insaurralde, Fernández aseguró que ese caso le dio «asco» porque se trata de una conducta «obscena».
«Simplemente es obsceno. A mi no me preocupa la vida privada de la gente en lo más mínimo, pero eso es obsceno, y lo más obsceno es que después aparezcan en la casa de una señorita 6.000.000 dólares son difíciles de explicar. Todo eso es una gran obscenidad para la Argentina», añadió.
Fernández, en otro tramo de la entrevista, dijo que su propósito en la coalición oficialista fue «preservar la unidad para no entrar en otra frustración argentina».
Acerca de su gestión, insistió en que le tocó «vivir un tiempo muy duro signado por problemas propios e internacionales» y sobre la pandemia por coronavirus remarcó que fueron «tiempos muy duros, pero muy duros».
Al mismo tiempo, consideró: «Pudimos avanzar en muchas cosas. Tuvimos que recomponer un sistema de salud pública y de educación que habían abandonado. Y me voy creando cinco universidades más».