El presidente le contestó al procurador interino respaldado por el macrismo y le achacó su «doble vara» y la de fiscales y jueces frente a distintas causas.
El presidente Alberto Fernández le contestó este viernes al procurador interino, Eduardo Casal, por las críticas que vertió sobre él a raíz de su defensa a la vicepresidenta Cristina Fernández Kirchner en el marco de la avanzada del lawfare.
Fernández le cuestionó su «doble vara» a la hora de evaluar hechos institucionales y su falta de impulso de investigaciones respecto al vínculo del ex presidente Mauricio Macri y su «mesa judicial» con ciertos fiscales y jueces que iban a la Quinta de Olivos.
El Presidente cuestionó el «celo» de Casal por los «procesos penales» en su carta, mientras que «hubiera sido importante, para la salud democrática de nuestro país, que se plasmara también en impulsar investigaciones transparentes» respecto a visitas de «destacados miembros del Poder Judicial a Macri» en la quinta de Olivos y en la Casa Rosada«, el rol del «prófugo» operador macrista Fabián “Pepín” Rodríguez Simón y otros ex funcionarios de la “Mesa Judicial” y en «garantizar la imparcialidad de quienes intervienen como magistrados y funcionarios en los procesos penales, máxime en el ámbito de la justicia federal, cuando se encuentran bajo investigación dirigentes políticos».
«En todos estos casos es imprescindible que los procesos sean transparentes y que los funcionarios y magistrados intervinientes no se encuentren bajo sospecha de actuar movidos por intereses ajenos a la búsqueda de la verdad», sentenció.
Fue así que cuestionó la «doble vara para medir hechos institucionales» y la «sistemática asimetría en las posturas adoptadas por parte de algunos importantes magistrados y funcionarios de la justicia federal e incluso del propio Procurador Adjunto frente a los distintos actores políticos».
Es por eso que, sostuvo, «tornan aún más necesario que se abran estos debates para cuidar la salud de la democracia y para que en la región no vuelva a ocurrir la afectación de los procesos electorales y de la vida democrática de la sociedad por la actuación de la justicia con intereses políticos y/o fácticos».
También le recordó a Casal que fue «convocado por el Congreso Nacional por su complacencia con un fiscal al que le permitió mantenerse en rebeldía por casi nueve meses y que luego resultó procesado en varias instancias».
Fernández acusó a Casal de no haberse «preocupado, ni ha visto injerencia alguna» cuando Macri, «estando en ejercicio del cargo, recibió al imputado Luis Chocobar en la casa Rosada y, mientras transcurría el juicio en el que este terminó condenado», recordando que en su Twitter sostuvo: “Lo acompañamos y que confiamos en que la justicia en otra instancia lo liberará de todo cargo, reconociendo su valentía”.
En la misma tesitura, el Presidente añadió que a Casal no le «llamó la atención» que Macri «instruyera a su Ministro de Justicia para que iniciara juicio político al juez Alejo Ramos Padilla y manifestara (textual) ‘creemos que no es un juez que actúe con ecuanimidad, que se prestó a un show mediático político'», y le advirtió al Consejo de la Magistratura que el magistrado hizo “varias» y anheló que con «todas las pruebas» el Cuerpo evaluara «seriamente destituirlo”.
En este caso, indicó el Jefe de Estado, «no se trataba simplemente de la opinión del ex presidente, sino de un pedido expreso de destitución de un juez que recién comenzaba una importante investigación sobre graves acciones de espionaje ilegal»
La carta del mandatario fue en respuesta a una nota enviada por el Procurador el jueves, por intermedio del Ministro de Justicia de la Nación, Martín Soria. En la misma, según Fernández, Casal definió como una «‘perturbación’ al ejercicio de las funciones de un fiscal» los dichos en el canal TN, donde el Presidente denunció una “persecución judicial y mediática” contra Vicepresidenta.
Fuente: El Destape