Junto a Axel Kicillof, Alberto Fernández señaló: «Miremos hacia el futuro, trabajemos unidos para que la derecha maldita vuelva a gobernar la Argentina».
El presidente Alberto Fernández se mostró hoy con el gobernador Axel Kicillof, en medio de la tensión interna que atraviesa el Frente de Todos y envió un mensaje a las fuerzas que componen el oficialismo.
Lo hizo desde la ciudad de Ensenada, al encabezar el anuncio del llamado a la licitación del Canal Magdalena, un reclamo histórico de varios sectores. Durante su exposición, el mandatario reiteró sus pedidos de unidad para evitar que Juntos por el Cambio, al que calificó como «la derecha maldita», se imponga en los comicios presidenciales.
«Se aproximan elecciones, hay mucho barullo en la política, que haya todo el barullo que quiera haber», planteó el mandatario en la previa a la reunión del Partido Justicialista (PJ) que tendrá lugar mañana, y continuó: «Pero por favor, nunca nos olvidemos que debemos estar más unidos que nunca porque nuestra división solo permite que la Argentina una vez más vea postergar sus ilusiones».
En la misma línea y ante la mirada atenta de funcionarios de su Gabinete y del gobierno provincial, Fernández señaló: «Miremos hacia el futuro, trabajemos unidos para que la derecha maldita vuelva a gobernar la Argentina».
Este viernes, el jefe de Estado volverá a reunirse con sus socios para «ponerle fecha» al Congreso Nacional del PJ, encuentro en el que el oficialismo «terminará de definir la estrategia electoral y los precandidatos» de cara a la elección presidencial.
El llamado a licitación del Canal Magdalena y la centralidad de la hidrovia
Desde el Partido de Ensenada, el mandatario anunció el llamado a licitación del Canal Magdalena, una vía de navegación que iniciará al sur del Canal Punta Indio y que posibilitará la conexión marítima entre los puertos del Río de la Plata y del litoral de las provincias argentinas, a través de un corredor logístico para el comercio exterior.
En la actualidad, los buques que ingresan ingresan a puertos argentinos a través del Río de la Plata deben esperar en una zona ubicada en aguas de uso común, hasta la autorización de la Administración General de Puertos, bajo la orbita del Nación uruguaya.
Al respecto, el Presidente cuestionó el sistema concesionado que regulaba la hidrovía Paraná-Paraguay-Uruguay, que operaba mediante el cobro de peajes, y anunció la creación de un ente argentino con sede en la ciudad de Rosario. Al respecto, detalló que se realizaron el manteamiento de las profundidades mediante el dragado y su respectivo balizamiento.
«La semana que viene vamos a estar poniendo en marcha el ente que va a regular el funcionamiento de la hidrovía. Eso es federalizar el país», prometió desde Ensenada, y subrayó: «Queríamos recuperar el control de nuestra vía navegable porque eso hace a nuestra soberanía».
En la misma línea, resaltó: «La concesión se terminó y le dije a la administración general de puertos que haga un contrato corto y al cabo de un año de gestión nos dimos cuenta que el Estado había ganado 20 millones de dólares».
Críticas a los gobernantes argentinos
En otro pasaje de su discurso, se mostró crítico de «los gobernantes argentinos» que no preservaron «los derechos del país como sí lo hicieron los uruguayos», y realizó lo que puede ser considerada como una crítica por elevación a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien prologó el contrato con la compañía belga Jan de Nul y la argentina Emepa hasta 2021.
«Muchos de los se enojaban conmigo, y me pedían con urgencia que terminara con eso, la habían concesionado por diez años más, pero yo esperé hasta que la concesión se termine y no la prorrogué más», resaltó el Presidente en compañía del gobernador, del ministro de Transporte, Diego Giuliano, y del intendente de Ensenada, Mario Secco.
Asimismo, se preguntó: «¿Qué estamos haciendo? Estamos recuperando los derechos soberanos. Dejar de tener un Estado estúpido que deja en manos privados lo que podrían ser recursos del Estado preserve para la gente».
«Esos son recursos que se vuelven en distribución de la gente. ¿Cómo piensan que se distribuye el ingreso? Así se desarrolla, así se distribuye. Lo hicimos con la hidrobia, pero no terminaba de cerrar sin la construcción del canal Magdalena», continuó el mandatario.
A su parte, adelantó que la semana próxima firmará una serie de acuerdos con su par de Uruguay, Luis Lacalle Pou para avanzar con la primera etapa de trabajo que durará siete meses. La segunda, implicará la ejecución del dragado de apertura hasta la profundidad de 11 metros a un tiempo de 21 meses.
«Durante estos cuatro años de gestión fui bastante asediado con el tema del Canal Magdalena y todos creían que tenía desinterés, lo mismo con la hidrobia, pero había que buscar buscar las condiciones, después del país que me dejó Macri, y de pasar la pandemia y la guerra, para poder hacer las cosas que la Argentina podía hacer», declaró Fernández, lo que produjo la risa del gobernador.
Por último, destacó la labor del vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos, en al construcción del llamado a licitación, y aclaró que se trató de una «decisión del Estado Nacional» que ocurre y repercute en la provincia.
En la previa, Axel Kicillof también hizo uso de la palabra en celebración de la construcción del canal. «Es una deuda que tenemos desde hace demasiado tiempo», ponderó y agregó: «No puede ser que debamos pedir permiso para navegar nuestros ríos y nuestros mares, y la solución se llama canal Magdalena».
El mandatario provincial fue fuertemente aplaudido por los presentes, entre ellos trabajadores del Astillero Río Santiago, que además entonaron el reconocido cantico «Patria sí, Colonia no».