La policía armenia detuvo a 273 manifestantes que bloqueaban carreteras en la capital, Ereván, en protesta por la reciente cesión de tierras a Azerbaiyán como parte de las negociaciones de paz entre ambos países.
El movimiento de protesta comenzó el mes pasado, después de que el gobierno armenio accediera a ceder territorios que había controlado desde la década de 1990. La situación alcanzó un punto crítico el pasado viernes, cuando Armenia entregó a Azerbaiyán cuatro pueblos fronterizos, en un paso significativo hacia la normalización de las relaciones entre los dos países, que han librado varias guerras.
Durante el fin de semana, miles de armenios salieron a las calles exigiendo la dimisión del primer ministro, Nikol Pashinyan, quien ha defendido la controvertida decisión como una medida necesaria para garantizar la paz con Bakú. Sin embargo, para muchos ciudadanos, la cesión de estos territorios estratégicos, que incluyen tramos importantes de una carretera hacia la vecina Georgia, es inaceptable.