Estaba dando misa a los jubilados y los detuvo la Policía Federal.
La tradicional marcha de los miércoles «terminó en brutal represión, detenciones ilegales y un hecho gravísimo: se desconoce el paradero del Padre Paco Oliveira, cura comprometido con los pobres, detenido ilegalmente por la Policía Federal junto a decenas de jubilados», así lo relataron los militantes que estuvieron en el lugar.
“Apalear a un abuelo por cobrar 320 mil pesos es el símbolo de un gobierno hambreador, servil a los intereses de Estados Unidos y enemigo del pueblo”. Los testigos narraron escenas de horror cuando las fuerzas del régimen golpearon sin piedad a adultos mayores que apenas sobreviven con migajas mientras el poder financiero se lleva el país por delante.
“¡Queremos al Padre Paco en libertad para todos los detenidos!”, gritan los jubilados desde la calle. El silencio oficial confirma lo peor: Milei gobierna con palos, miedo y represión.
