Este distintivo es uno de los primeros que tuvo nuestro país en la historia, antes de poseer una bandera propia o el mismo himno nacional.
Uno de nuestros distintivos más importantes conmemora este miércoles una fecha especial, se trata del Día de la Escarapela, la insignia nacional utilizada en 1812 por pedido del General Manuel Belgrano.
Ese momento clave que da inicio al Día de la Escarapela fue en el año 1812, cuando tras el objetivo de distinguirse del ejército invasor realista, Manuel Belgrano instauró su uso.
En la actual ciudad de Rosario, el 13 de febrero de ese año, el mismo general le pidió al Primer Triunvirato que avalara el uso de la escarapela con los colores celeste y blanco para las tropas de las Provincias Unidas del Río de La Plata. El requerimiento fue aceptado cinco días más tarde, el 18 de febrero, mientras tanto, el enemigo utilizaba el rojo.
Escarapela: elección de la fecha
Después de haber sido clave en el enfrentamiento bélico, y de los pedidos para su institucionalización, la conmemoración del Día de la Escarapela fue motorizada por el Consejo Nacional de Educación el 13 de mayo de 1934.
El organismo educativo autorizó la celebración de la fiesta del Día de la Escarapela, pero, sin establecer razones ni dar mayores explicaciones, definió que sería el 18 en lugar del 20. Por resolución del 4 de abril de 1941 instituyó el 18 de mayo como Día de la Escarapela y en 1951 fue incluido en el calendario escolar.

En cuanto al origen de los colores de la escarapela y las razones por las que fueron elegidos para simbolizar a la Patria, no pueden establecerse con precisión.
Se dice también que la escarapela argentina, y el origen del Día de la Escarapela, fue utilizada por primera vez por un grupo de damas de Buenos Aires al presentarse a una entrevista con el entonces coronel Cornelio de Saavedra, jefe del regimiento de Patricios, el 19 de mayo de 1810.
Fuente: Crónica