El secretario de Ambiente, Santiago Azulay, se refirió a los incendios que vienen produciéndose en la provincia y llamó a la conciencia social en cuanto al impacto de estos. Luego del incendio en la zona de Juan Caro el Gobierno provincial presentó denuncias penales para que se investiguen los responsables y se ejecuten sanciones.
En dialogo con Medios Rioja, el funcionario explicó que “la situación con los incendios es global en todo el planeta, una de las formas que se manifiesta el cambio climático es con incendios forestales. El cambio climático es un efecto del calentamiento global, se producen por los gases de efecto invernadero como el carbono. Estos estimulan a las plantas a generar más hojas, tallos, ramas, cortezas, lo que se acumula en el piso y es más combustible a la hora de los incendios. Más temperatura, más viento, menos humedad, claramente los incendios van a ser cada vez más voraces y se van a propagar con cada vez más violencia. Tenemos que ser cuidadosos como sociedad frente a estos fenómenos para que no nos vuelvan a suceder”.
Por otro lado, consideró que es necesario un esquema de sanciones para quienes incumplan las normas y uno de estímulos para quienes si cumplen. “Estamos estudiando normas complementarias, hoy el código penal prevé la situación, está regulado”, aseguró.
A su vez informó que se presentaron denuncias penales por los últimos incendios producidos. “Esperamos que la justicia actué lo más rápido posible y determine quienes son los responsables de estos incendios que tanto perjuicio nos causan a todos los riojanos”, dijo el secretario.
En relación a los incendios producidos en la Capital, en el paraje Juan Caro y el Barrio Aguadita de Vargas, Azulay aclaró que no fue el incendio más grande que tuvo la provincia, pero “le dio visibilidad al tema porque todos los ciudadanos de la capital fueron espectadores de la situación”. “Esto no debería ser una anécdota, sino que debería ser un episodio que ayude a generar conciencia social”, opinó.
En el mismo sentido manifestó: “esperamos que la sociedad se dé cuenta que el fuego no es una herramienta de limpieza, el fuego no es una herramienta para quemar el campo. La situación climática cambio, hoy la perdida es mucho mayor en un incendio que hace 10 años, ahora cubren más terreno y arrancan bosques nativos, al quemarse un árbol el carbono que estaba atrapado en ese árbol y se libera de nuevo”.
Finalmente, el secretario advirtió: “el suelo después de un incendio pierde un montón de microorganismos que hacen fundamental la vida en ese ecosistema, se profundizan los procesos de desertificación de deforestación, eso agrava la situación climática”.