La presentación señala que las periodistas vertieron «agresiones, improperios, expresiones violentas, discriminatorias y agraviantes» para «hostigar y amedrentar» a la vicepresidenta Cristina Kirchner y a su hija.
La ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad, Ayelén Mazzina Guiñazú, denunció ante el Enacom a las periodistas Viviana Canosa y Laura Di Marco, del canal La Nación+, por expresiones «violentas, discriminatorias y agraviantes» hacia la vicepresidenta Cristina Kirchner y su hija Florencia.
En la denuncia, presentada ante el titular del Enacom, Claudio Ambrosini, la ministra Mazzina explicó que se trata de expresiones realizadas por esas periodistas en el programa «+ Viviana», emitido el jueves 6 de abril en la mencionada señal de noticias.
En el texto de la presentación, se indica que en ese programa tanto Canosa como Di Marco vertieron «agresiones, improperios, expresiones violentas, discriminatorias y agraviantes, ataques, gestos y diversas manifestaciones contrarias al ordenamiento jurídico a fin de hostigar y amedrentar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y a su hija Florencia Kirchner».
Esas expresiones «colisionan con lo normado en la ley 23.592 de actos discriminatorios y, por otro lado, configuraron actos de violencia psicológica, política, público-política y simbólica por motivos de género», según lo establecido en distintos artículos de la «ley 26.485 de Protección Integral de las Mujeres».
«Propinar discursos de odio estigmatizando a mujeres -y comprendiendo la dimensión objetiva que esa identidad implica- son motivo de nuestra observación y preocupación», se indica en el texto presentado ante el Enacom.
La denuncia sostiene que «determinados mensajes construyen y refuerzan patrones socioculturales alejados del esfuerzo por prevenir y erradicar la violencia por motivos de género y la discriminación, a la vez que revisten en sí mismos hechos de violencia».
En su presentación, el ministerio conducido por Mazzina advirtió que «los hechos de violencia contra Cristina Fernández de Kirchner y su hija Florencia Kirchner deben analizarse obligatoriamente en un contexto de violencia de género».
«Sin ir más lejos -se agrega- el intento de magnifemicidio cometido contra Cristina Fernández de Kirchner el 1 de septiembre de 2022 resulta inescindible de la serie de violencias previas sostenidas, crecientes, que habilitaron y convalidaron ese hecho».
También se argumenta que «la utilización de agresiones, intimidaciones, expresiones discriminatorias y violentas, y el hostigamiento contra Florencia Kirchner» tiene el objeto de «menoscabar y anular la participación política de su madre».
La ministra Mazzina reclamó en ese contexto al Enacom que se tenga por presentado el escrito y que se «instruya de manera urgente la presente denuncia, disponiéndose las medidas pertinentes para hacerlos cesar sin demora».