El jugador también afirmó que no subestimarán a Boca, ya que reconocen su historia y su huella en la Libertadores, con seis títulos, por la calidad de sus jugadores y por su estilo de juego.
El mediocampista del Fluminense, Paulo Henrique Ganso, aseguró que será una final de Copa Libertadores muy diferente por la historia y el respeto que le tienen a Boca, pero que están tranquilos y preparados para disputar el encuentro más importante del año en el fútbol sudamericano.
«Estoy muy tranquilo. Tenemos mucho respeto por el equipo de Boca y por la historia», expresó el mediocampista que supo ser campeón de la Copa Libertadores en el 2011 con el Santos, junto a Neymar, y luego jugó la final del Mundial de Clubes frente al mejor Barcelona de la historia que tenía a Lionel Messi, Xavi y Andrés Iniesta.
Y agregó que nadie confiaba en que llegarían a la definición de la copa: «Esta final es muy diferente. Tuvimos mucho más de lo que se esperaba desde el inicio de la competición, ya que mucha gente decía que no íbamos a llegar hasta esta instancia. Es un momento muy especial para el equipo y para mi carrera».
Ante la inevitable comparación con Juan Román Riquelme, por su juego vistoso y de calidad sobresaliente, Ganso aseguró que es un muy fanático del último 10 de Boca: «Soy fanático de Riquelme, pero le guardo respeto porque está muy por encima mío».
Ganso también afirmó que no subestimarán a Boca, ya que reconocen su historia y su huella en la Libertadores, con seis títulos, por la calidad de sus jugadores y por su estilo de juego.
Y ante una posible definición por penales, el volante bromeó que «ojalá no lleguen» por la fama de Sergio Romero bajo los tres palos.
«Germán (Cano) es un tipo increíble y espero que pueda hacer los goles que precisamos en la final. No es solo eso, es un amigo, el goleador de la Libertadores y ojalá que esta sea su final y pueda demostrar que puede ganarla», concluyó Ganso sobre el artillero de la competición.
NA