Seis obispos argentinos, incluido el recién nominado prefecto del Dicasterio de la Doctrina de la Fe Víctor Fernández, participarán con voto en el Sínodo vaticano de octubre de este año, en el que religiosos y laicos de todo el mundo debatirán sobre la acogida en la Iglesia de «divorciados vueltos a casar» y «personas LGTBQ+», además de otros temas sobre la vida y organización de la Iglesia.
Fernández y el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), Oscar Ojea, encabezan la lista que incluye además a los arzobispos de Mendoza, Marcelo Colombo, y de Bahía Blanca, Carlos Azpiroz Costa.
Los otros obispos que formarán parte del encuentro sobre la «Sinodalidad» que tendrá una segunda parte en octubre de 2024 son el obispo de La Rioja Dante Braida y el arzobispo de Córdoba, Ángel Rossi. También estarán, como expertos, los reverendos Pedro Brassesco y Carlos Galli.
«Tenemos representantes de todos los continentes, incluido un representante del sínodo digital», anunció hoy el cardenal Mario Grech, secretario general del Sínodo.
El Vaticano publicó el mes pasado el denominado «Instrumentum laboris» para el «Sínodo de la Sinodalidad» que en octubre de 2023 tendrá una primera fase en Roma y se completará en 2024, y que incluirá preguntas a los participantes sobre el celibato opcional, el acceso de la mujer al diaconado, la acogida de divorciados o el colectivo LGTBQ+ en la Iglesia, cambios profundos en la estructura institucional de la Iglesia, el papel del primado de Pedro, cómo aprender de otras comunidades cristianas e, incluso, la creación de un ministerio específico para el cuidado de los «descartados».
«Habrá tres palabras clave: armonía, para mostrar la unidad en la fe y que somos una única Iglesia, con un no a la polarización o la confrontación; polifonía, para mostrar la variedad; y sinfonía, para mostrar juntos la belleza de la evangelización», planteó el subsecretario general del Sínodo, Luis Marín de San Martín.
Marín de San Martín resaltó, además, el espíritu de comunión que habrá en la Asamblea que empezará «con un retiro espiritual de tres días en el que estaremos juntos todos los participantes» del encuentro
La reunión tendrá la particularidad ya anunciada por el Vaticano de que, por decisión de Francisco, al menos 35 mujeres laicas participarán con derecho a voto, además de otras cinco religiosas, en una apertura inédita para la participación femenina en un ámbito hasta ahora reservado a religiosos y laicos varones.
El voto femenino fue anunciado en abril, junto a otras novedades como la designación de «70 miembros no Obispos, que representan a otros fieles del Pueblo de Dios (sacerdotes, personas consagradas, diáconos, fieles laicos)» con derecho a voto, entre los que «se pide que el 50% de ellos sean mujeres y que se valore también la presencia de jóvenes».
Los 70 miembros laicos serán elegidos por Francisco sobre una lista de 140 que le harán llegar distintos organismos religiosos de todo el mundo. Los cambios ya estarán operativos en el Sínodo sobre la Sinodalidad que se hará en octubre de 2023 y el mismo mes ed 2024 en Roma
(Télam)