Referentes del sector advirtieron que el ajuste del Gobierno nacional repercutió en la industria textil que, a 10 meses de la llegada de Javier Milei, no logra repuntar la producción ni las ventas.
La crisis económica que atraviesa el país impacta de lleno en las industrias de las provincias que no registran un repunte de ningún tipo. Tal es el caso del Parque Industrial de La Rioja que, según informó la federación Obrera de la Industria del Vestido y Afines (FONIVA), en los últimos días, 143 trabajadores de la empresa Textil COM fueron despedidos.
Estos datos no son números aislados. Hace un mes atrás, la Secretaría de Industria de La Rioja había informado que el sector industrial había llegado a los 500 despidos y las 300 suspensiones durante el 2024. Estas cifras se registran desde la asunción de Javier Milei como presidente de la Nación y la implementación de de sus políticas de ajuste.
Gustavo Castro, delegado provincial de FONIVA, dialogó con El Independiente y expresó: «La reactivación tan esperada de la economía que se tenía previsto para la segunda fase del año no llegó», e indicó que el consumo tampoco logró repuntar, lo que concluyó en que distintas empresas de confección, radicadas en la provincia y el resto del país, no hayan tenido el «oxígeno necesario», para poder afrontar esta crisis y poder seguir produciendo.
«La situación es complicada, las empresas si bien dejaron de suspender y despedir empleados, al día de hoy, si te pones a hablar con empresarios de nuestro rubro están viendo cómo llegan a fin de año», explicó el referente y enfatizó que «la reactivación no se dio, y si no tenemos dinero en el bolsillo el consumo no se va a reactivar».
Además, advirtió que la mano de obra de las empresas pierden cada semana por la modificación de las leyes de importación. «La semana pasada se le quitaron distintas trabas que tenía la importación y dentro de ella estaban los insumos confeccionados, prendas de vestir, hilados. Se nos hace cada vez más difícil y teniendo siempre un Gobierno Nacional que pareciera ser que no le interesa mucho la industria nacional. No tomó ninguna medida de protección, ni textiles, calzados u otra actividad», detalló.
Reconvertir para subsistir
El delegado indicó que en la actualidad, las empresas están «subsistiendo», y explicó que las que se dedican a confeccionar ropa de mujer están «esperanzados», en bisperas del Día de la Madre. por su parte, las empresas que hacen ropa de trabajo, al no reactivarse la obra pública directamente cambiaron para hacer otro producto que tenga salida comercial.
«El empresario que tenga hoy por darte un ejemplo 100 trabajadores, le va a convenir traer el producto armado», remarcó Castro y enfatizó que «luego se van a volcar a ese cierre de fábricas. Si yo tengo un gasto en tener 100 trabajadores, de 2 millones de dólares al año, y me conviene traer el producto armado por 2 millones de dólares sin tener empelados, pagar carga social, sindicato vamos a eso».
Con respecto a los trabajadores de Textil COM, Castro afirmo que se avanzó con la patronal de esta empresa, con el objetivo de tratar de llegar a un acuerdo y concluyó que se negocia el pago de la indemnización de los 143 trabajadores ya que «el empresario debe saldar y que debe tener un final bien tanto para él como los trabajadores».