El actor contó detalles del incidente que sufrió cuando viajaba junto a su mujer.
Hace poco más de un mes, un vuelo de Lufthansa que iba de Estados Unidos a Alemania cayó casi 1200 metros por causa de una fuerte turbulencia. Allí se encontraban el actor Matthew McConaughey y su mujer, Camila Alves.
La primera en hablar sobre lo ocurrido fue la mujer del actor, al día siguiente del incidente: “En el vuelo de anoche, el avión cayó casi 4000 pies (más de 1200 metros), 7 personas fueron al hospital. Todo volaba por todas partes. Por respetar la privacidad de los que me rodean, eso es todo lo que estoy mostrando pero el avión era un caos. Y las turbulencias seguían llegando. ¡El vuelo de Lufthansa que estás viendo en las noticias hoy! Sí, ese mismo. Gracias a Dios todos están a salvo y bien”.
Lo que no se sabía es que Camila viajaba junto a su marido, quien recién ahora se animó a hablar del susto que vivió a bordo del avión. En el adelanto del podcast Let’s Talk Off Camera de Kelly Ripa, el ganador del Oscar, de 53 años, dijo: «La bandeja de la comida es lo que me sujetó. No llevaba puesto el cinturón de seguridad, y no hubo ningún aviso de abrochar el cinturón de seguridad justo antes de que ocurriera”.
Lo primero que hizo fue ver si su mujer estaba bien sujetaba. “Fue un tremendo susto, no tenía forma de controlar esta situación el momento. Algunas personas guardaban un silencio sepulcral. Otros se reían a carcajadas. Y no era una risa de ‘Esto es divertido’, sino como de ‘Estoy en shock. De repente tu vino tinto, el vaso y los platos en los que estaba tu comida están todos suspendidos, flotando y quietos en el aire… Y de un segundo a otro todo se viene abajo”, recordó McConaughey.
“El hierro se dobló y yo pensaba… ‘¿Puede el avión aguantar eso? Y mi amigo (que es piloto de avión) me dijo: ‘Estas cosas están tan probadas, que sí, no te preocupes, el avión estructuralmente puede aguantar eso’. Y yo le pregunté: ‘Si algo va mal, ¿podrías pilotarlo?’. Y él me dijo: ‘No hay problema’. Y yo dije: ‘Genial, me encanta oír eso’”, reveló. Después el actor no dudó en calificar el incidente como el “más espeluznante” de su vida.
El vuelo 469 de Lufthansa, que se dirigía de Austin, Texas, a Frankfurt, Alemania, volaba a más de 11.000 metros de altura cuando comenzaron las turbulencias. La aeronave cayó unos 1200 metros, dejando 7 heridos. Por tal motivo, se aterrizó de emergencia en el Aeropuerto Internacional Dulles de Virginia.