A la jornada de duelo y protesta, se le suma una medida de fuerza por tiempo indeterminado de 22 a 6, horario en que las estaciones dejarán de prestar servicio, al aguardo de un plan de seguridad para el sector.
La medida se toma luego del asesinato de Bruno Bussanich, joven de 25 años de edad, quien trabajaba en una estación de servicio cuando, pasada la medianoche, fue baleado en una pequeña oficina del establecimiento.
El comunicado sobre las medidas a tomar, fue firmado por los máximos referentes de las estaciones de expendio de combustible y del Sindicato de trabajadores.