Las palabras del Papa se dan en un marco de fuertes presiones del Gobierno ucraniano para que el pontífice visite su país, un viaje que si bien es un «deseo» del Papa, tiene una logística que el propio Bergoglio consideró «complicada» por el momento.
El papa Francisco denunció este miércoles que, a seis meses del inicio de la guerra en Ucrania, «los inocentes están pagando la locura de las partes», al tiempo que pidió «paz» y lamentó el asesinato de la hija de un pensador ruso que apoya la invasión, del que Rusia acusa a Ucrania.
«Pienso en tanta crueldad, en tantos inocentes que están pagando la locura de todas las partes, porque la guerra es una locura. Y ninguno que esté en guerra puede decir ‘no, yo no estoy loco'», enfatizó además el Papa desde el Vaticano.
«Renuevo la invitación a implorarle al Señor la paz por el amado pueblo ucraniano que hace seis meses hoy sufre el horror de la guerra», planteó el pontífice durante la Audiencia General que encabezó este miércoles, en referencia a la invasión rusa de Ucrania iniciada el 24 de febrero.
«Deseo que se den pasos concretos para poner fin a la guerra y alejar el riesgo del desastre nuclear», enfatizó en esa dirección ante casi 6.000 fieles reunidos en el Aula Pablo VI.
Las palabras del Papa se dan en un marco de fuertes presiones del Gobierno ucraniano para que el pontífice visite su país, un viaje que si bien es un «deseo» del Papa, tiene una logística que el propio Bergoglio consideró «complicada» por el momento.
«Llevo en el corazón a los prisioneros, sobre todo a los que se encuentran en condiciones frágiles, y pido a las autoridades responsables que actúen por su liberación», reclamó el Papa.
Francisco manifestó luego su preocupación por «los niños, tantos muertos, y también tantos refugiados».
«Tantos heridos, tantos niños ucranianos y rusos que quedaron huérfanos. La orfandad no tiene nacionalidad: perdieron el papa o la mama, sean rusos o ucranianos», lamentó.
«Pienso en tanta crueldad, en tantos inocentes que están pagando la locura de todas las partes, porque la guerra es una locura. Y ninguno que esté en guerra puede decir ‘no, yo no estoy loco'», enfatizó Jorge Bergoglio.
En ese marco, se refirió, sin nombrarla, a Daria Duguina, asesinada la semana pasada en Moscú con una bomba colocada bajo su auto y dirigida a su padre Alexander Duguin, un filósofo al que la prensa occidental suele presentar como mentor ideológico del Kremlin.
Duguin ha creado y desarrollado conceptos geopolíticos que han dado sustento ideológico a las justificaciones del presidente ruso, Vladimir Putin, y del Kremlin para anexionarse la península ucraniana de Crimea en 2014 e invadir Ucrania este año.
Rusia acusó del asesinato de la joven de 29 años a los servicios de inteligencia ucranianos, pero Ucrania lo niega.
«Pienso en una pobre joven volada por los aires por una bomba puesta bajo el asiento del auto en Moscú. Los inocentes pagan la guerra», planteó Jorge Bergoglio.
«Pensemos esta realidad y digámonos el uno al otro que la guerra es una locura. Todos los que ganan con la guerra o con el comercio de armas son delincuentes que matan a la humanidad», dijo, en una nueva crítica a los productores y vendedores de armas.
En su mensaje, el pontífice invitó también a pensar «en otros países que están en guerra hace tiempo».
«Hace mas de diez años Siria; o Yemen, con tantos niños que pasan hambre; o los rohingya, que giran por el mundo por la injusticia de ser echados de su tierra», detalló en referencia a la etnia musulmana expulsada de Myanmar y que se refugia principalmente en Bangladesh
«Hoy en especial, a seis meses del inicio de la guerra, pensamos en Ucrania y Rusia», agregó el Papa, antes de pedirle a la Virgen que «lleve la paz» a los dos países.
«Necesitamos paz», finalizó en ese marco.
Fuente: Télam