El equipo de Felipe Contepomi perdió contra los Springboks en la capital de Inglaterra por un ajustado 27-29 y terminó en el cuarto puesto del torneo.
El Rugby Championship llegó a su fin con un desafío de alto voltaje para Los Pumas. El seleccionado argentino cayó ante Sudáfrica en el estadio de Twickenham, en Londres por 27-29, con la sensación de que podría haberse hecho un poco más.
Pese al 67-30 de la semana anterior, los Pumas comenzaron a toda máquina: Bautista Delguy fue el protagonista de los primeros minutos de juego, ya que abrió el marcador gracias a tener un hombre más. Con try apenas los primeros minutos del partido, Santiago Carreras concretó una buena conversión para ponerse 7-0.
Los Springboks no se quedaron atrás y solo a unos minutos se adelantaron a través de la vía del penal. Alrededor de los 20 minutos, Los Pumas volvieron a encontrarse con la oportunidad de estirar la ventaja y se mantuvieron 13-3 hasta el final de la primera mitad.
A pesar del empuje y aguante del final, el equipo argentino pagó caro las desconcentraciones de los últimos minutos y permitió que los Springboks se acercaran a partir del try de Cobus Reinach para achicar la diferencia 13-10 al término de la primera mitad.
Los argentinos no resistieron por mucho más: a los 5 minutos ya se pusieron los Springboks al frente del marcador por 13-15, aguantando con 14 jugadores en cancha. Con polémica de por medio, los sudafricanos volvieron a adelantarse, se pusieron 22-13 y comenzaron a marcar la diferencia, tal como ocurrió el fin de semana pasado.
Sobre el final del partido, Santiago Carreras tuvo una chance inmejorable para acercarse en el marcador, pero el penal pegó en los palos y dejó un final completamente abierto y con aire para los sudafricanos.
Fue justamente el 15 que consiguió un penal que Los Pumas lograron convertir en try en manos de Rodrigo Isgró a menos de dos minutos del final y, pese a que quedaron muy cerquita, se llevaron una derrota con sabor amargo… con un sabor de que podría haber sido un poco más.
De esta manera, los Springboks volvieron a gritar campeón y los dirigidos por Santiago Contepomi quedaron en el cuarto lugar de la tabla de posiciones.
