El mandatario brasileño retomará mañana su agenda luego de la operación del martes pasado.
El presidente de Brasil, Luis Inácio Lula Da Silva recibió este domingo el alta médica tras la intervención de urgencia a la que de debió ser sometido el martes pasado.
El mandatario del país vecino fue operado por una hemorragia intracraneal derivada de un golpe que había sufrido hace dos meses.
Lula podrá retomar su actividad oficial mañana, aunque los médicos le recomendaron mantener la exigencia a un nivel bajo durante los próximos quince días.
El presidente de Brasil, de 79 años, expresó: “Estoy aquí, entero, volviendo a casa».
Lula apareció de sorpresa en la conferencia de Prensa que se llevaba a cabo en el hospital de San Pablo donde estuvo internado, a cargo de sus médicos.
“Muchas gracias por las oraciones. Y, los que sólo tienen odio, quedan perdonados. Estoy aquí, vivo, entero y con más ganas de trabajar”, subrayó Lula en sus redes sociales.
Tuvo «miedo» por la hemorragia en la cabeza
Lula da Silva reveló que está listo para volver a trabajar, aunque se asustó y tuvo miedo de morir a raíz de la hemorragia interna craneal por la que fue operado de urgencia el pasado 10 de diciembre.
«Nunca pienso que me voy a morir, pero tengo miedo», dijo el mandatario brasileño al usar un sombrero que según explicó le sirve para no exhibir las heridas, además de mostrarse al lado de su equipo médico y de la primera dama, Rosángela da Silva.
El mandatario brasileño de 79 años, dijo que se llevó un «gran susto» con los síntomas y la urgencia con la que fue trasladado para la operación de emergencia del martes, condición que fue producto de un golpe en la cabeza el 19 de octubre pasado. durante un accidente doméstico.
«Me asusté de la cantidad de líquido que había en mi cabeza por el cual tuve que ser operado», señaló el presidente.
«Agradezco al equipo de médicos y enfermeros que me cuidaron no como un paciente y sí como un hermano», dijo el fundador del Partido de los Trabajadores (PT).