El expresidente Mauricio Macri expresó hoy que respeta «enormemente» a los votantes del candidato libertario Javier Milei, pero advirtió que para realizar «el cambio» se debe «tener experiencia, equipo y un volumen político» para no «frustrarse de vuelta», al visitar San Carlos de Bariloche, donde fue abucheado tras comprar chocolates en un local céntrico.
«Entiendo y respeto enormemente a aquellos que han votado a los libertarios, porque quieren un cambio, pero yo les vengo a decir que el cambio hay que hacerlo realidad y eso es tener experiencia, un equipo, un volumen político», dijo Macri en conferencia de prensa en el hotel Cacique Inacayal, y horas después sacó una nota de apoyo a Patricia Bullrich.
Horas después, publicó un texto en sus redes sociales en el que abundó en estos conceptos en respaldo a la candidata presidencial de Juntos por el Cambio (JxC), Patricia Bullrich, en un nuevo intento por morigerar sus acercamientos con el partido de Milei.
«Por un lado está Patricia, que llegará con un equipo técnico de primer nivel, ministros expertos, legisladores, intendentes, gobernadores y una red nacional de fuerzas que le darán los músculos necesarios para poder llevar a cabo los enormes cambios que están pendientes», indicó Macri, y agregó que «del otro lado» están el candidato de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, y Milei.
Sobre Massa recalcó que representa un gobierno «escandalosamente corrupto, que lleva como candidato al ministro que nos deja quebrados, en el umbral de la hiperinflación» y del de La Libertad Avanza remarcó que es «una agrupación aún inmadura» y que pese a «algunas buenas ideas que pueden tener no están acompañadas por la fuerza material necesaria para llevarlas a cabo».
«Si ganaran eventualmente, llegarían sin un solo gobernador, pocos intendentes y un puñado de legisladores; no podrán producir cambios. Hablo por experiencia, yo goberné con solo cuatro gobernadores y en minoría parlamentaria. Sé que es imposible para cualquiera encarar los cambios estructurales que hay que hacer sin todo el poder necesario», agregó en relación a un posible gobierno de Milei.
En la conferencia de prensa en Bariloche, planteó que «las encuestas han perdido total precisión» y que luego del 22 de octubre habrá balotaje entre Bullrich y Milei porque «los argentinos decidieron mayoritariamente» por las «propuestas de cambio».
«En la segunda vuelta entre JxC y los libertarios se va a discutir quién está capacitado para hacer ese cambio realidad», agregó. El presidente de la Fundación FIFA sugirió que Bullrich, en estos cinco días previos a los comicios, debe comunicar «minuto a minuto a cada argentino» por qué se deben hacer reformas y detallar que «hoy no es lo mismo» que 2015.
«En 2015 había una vocación de un cambio político, crear un gobierno que fuese transparente, honesto, que se abriese al mundo, pero todavía no estábamos listos para entender que lo que nos va a salvar es aquello que trajo a nuestros abuelos a vivir acá a Bariloche, que es la cultura del trabajo», dijo.
Tras la conferencia, Macri fue a un negocio a comprar chocolates y a la salida fue abucheado e insultado por personas que se acercaron al lugar. Entre el bullicio, cantos y gritos que lo acusaban de «vende patria», Macri fue retirado en una camioneta rumbo al aeropuerto de Bariloche.
La conferencia tuvo como slogan la consigna «Una Patagonia Ordenada», sobre lo que hizo alusión al decir que «el país tiene de todo y los argentinos no tenemos nada», slogan de campaña de Bullrich. «La Patagonia es tal vez el ejemplo más cruel de eso, porque las riquezas que tienen acá son infinitas y nunca hemos tenido la capacidad de ordenarnos, de que esté dentro de la ley, donde no hayan unos pocos que se apropien de privilegios e impidan que se desarrolle la agricultura, el turismo, las energías y la pesca», subrayó. (Télam)