La futura canciller se encontró con el ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Mauro Vieira, a quien le dio la comunicación, como parte de la presentación del Gobierno electo de Javier Milei ante el del presidente Luiz Inácio Lula da Silva
El presidente electo Javier Milei invitó este domingo a la ceremonia de su asunción al mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, en una carta entregada personalmente este domingo en Brasilia por la canciller designada, la diputada electa Diana Mondino, al ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Mauro Vieira.
«Ambas naciones tenemos muchos desafíos por delante y estoy convencido de que un cambio en lo económico, en lo social y lo cultural, basado en los principios de la libertad, nos posicionará como países competitivos en los que sus ciudadanos puedan desarrollar al máximo a capacidades y así, elegir el futuro que deseen», expresó un tramo de la carta de Milei a Lula Da Silva.
Mondino se reunió pasado este mediodía en el despacho del canciller Mauro Vieira, en Brasilia, acompañada por el embajador argentino en Brasilia, Daniel Scioli, y el brasileño en Buenos Aires, Julio Bitelli, con el objetivo de acercar posiciones con el principal socio comercial.
«Fue un viaje relámpago que fue mantenido en sigilo hasta último momento», dijo una fuente a Télam.
La misiva invita a Lula a la ceremonia de asunción luego de las diferencias surgidas porque el candidato de La Libertad Avanza llamó al brasileño durante la campaña electoral, «ladrón» y «comunista furioso».
Milei es un aliado del expresidente brasileño Jair Bolsonaro, quien confirmó que viajará a la ceremonia de asunción acompañado por una comitiva de 20 personas, entre ellas los gobernadores de San Pablo, Goiás y Santa Catarina.
«Le hago llegar el presente mensaje, portador de mi saludo cordial y a fin de transmitirle la invitación para que me acompañe, el próximo 10 de diciembre, en los actos que aquí tendrán lugar con motivo de mi asunción del Mando Presidencial», dice la carta entregada por Mondino.
La información fue ratificada por la Cancillería de Brasil, que emitió un comunicado en el que se afirma: «La diputada electa y canciller designada por el gobierno de Milei, Diana Mondino, se encuentra en Brasilia para una reunión de trabajo con el ministro Mauro Vieira. En la ocasión, entregó la invitación del presidente de electo Javier Milei para que el presidente Lula participe de la toma de posesión, el 10 de diciembre».
El acercamiento entre el futuro gobierno de Milei con Lula ocurre luego de que el ministro de Comunicación Social de Brasil, Paulo Pimenta, dijera que el presidente brasileño accedería a llamarlo por la elección una vez que presentara disculpas por los dichos en campaña.
El jueves pasado el asesor especial de Asuntos Internacionales brasileño, Celso Amorim, dijo que creía que Lula no iba a ir a la asunción de Milei porque había sido ofendido durante la campaña en términos personales.
En la carta, Milei ratificó el vínculo histórico y de relación económica entre la Argentina y Brasil.
«Sabemos que nuestros dos países están estrechamente ligados por la geografía y la historia y a partir de ello deseamos seguir compartiendo áreas de complementariedad, a nivel de integración física, comercio y presencia internacional, que permitan que todo este accionar se traduzca, en ambos lados, en crecimiento y prosperidad para argentinos y brasileños», dice la misiva.
Y finaliza: «Deseo que el tiempo en común como Presidentes y Jefes de Gobierno sea una etapa de trabajo fructífero y construcción de lazos que consoliden el papel que Argentina y Brasil pueden y deben cumplir en el concierto de Naciones».
Argentina es el tercer socio comercial de Brasil después de China y Estados Unidos y la visita de Mondino ocurre en vísperas un encuentro empresarial entre dirigentes de la Confederación Nacional de la Industria (CNI) brasileña y la Unión Industrial Argentina en Brasilia.
Ese evento, según fuentes argentinas, iba a estar centrado en las incertidumbres sobre la relación bilateral, un asunto que intentó despejar Mondino con su presentación ante Vieira.
El malestar de Lula
El presidente Lula, al abrir la planificación para asumir la presidencia del G-20 durante un año, fustigó esta semana el accionar del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Argentina, por lo que reclamó una reforma de los organismos multilaterales de crédito.
Lula dijo que estaba dispuesto a llegar a un «acuerdo» para relacionarse con la Argentina de Milei, al afirmar que no está obligado a estar de acuerdo con sus colegas mandatarios sudamericanos.
El expresidente Bolsonaro anticipó el último jueves que si Lula asiste a la asunción de Milei será «abucheado» por los argentinos del nuevo gobierno.
«Si Lula va (a la asunción) será abucheado, se la tendrá que aguantar», expresó Bolsonaro al diario Folha de Sao Paulo, al comentar la posibilidad de que tanto él como el actual mandatario brasileño puedan acudir a la ceremonia de asunción de Milei en Buenos Aires.
El comentario se dio luego de que Milei dijera el miércoles que Lula «será bienvenido» en caso de que decida acudir a la ceremonia de asunción representando a Brasil.
«Para mí, Lula no existe, (si él va) cumplirá sus obligaciones y yo cumpliré las mías; no voy a pelearme con nadie», dijo el expresidente ultraderechista, quien el lunes pasado conversó con Milei para felicitarlo por la victoria en el balotaje del día anterior.
Una fuente de la organización del viaje de Bolsonaro a Buenos Aires, donde irá con una comitiva de 20 políticos, informó a Télam que están confirmados al menos tres gobernadores alineados con el bolsonarismo: el de San Pablo, Tarcisio de Freitas; el de Santa Catarina, Jorginho Mello; y el de Goiás, Ronaldo Caiado.
El prolibertario Romeu Zema, del Partido Novo, que gobierna Minas Gerais, no confirmó su presencia.
Según la fuente, entre los aliados de Bolsonaro que tienen previsto asistir a la toma de posesión en la Argentina se encuentran el presidente nacional del Partido Liberal, Valdemar Costa Neto; y los senadores Ciro Nogueira, Rogerio Marinho, Marcos Rogério, Jorge Seif y Magno Malta.
Nogueira fue jefe de gabinete de Bolsonaro, mientras que Marinho fue ministro de Desarrollo Regional y es uno de los principales opositores en el Congreso al gobierno de Lula.