Kharlan decidió no cumplir con el reglamento y podría ser sancionada con dos meses de inhabilitación.
La ucraniana Olga Kharlan fue descalificada este jeves del Mundial de esgrima, en Milán, Italia, por no darle la mano a su rival rusa Anna Smirnova, quien participó como «atleta individual neutral».
Kharlan, cuádruple campeona del mundo de sable y y una de las estrellas del deporte de su país, venció a Smirnova (15-7) y se negó a saludarla y a darle la mano, apoyada durante el duelo por unos veinte integrantes de la delegación ucraniana al grito de ‘Slava Ukraini’ («Gloria a Ucrania»).
La ucraniana, campeona olímpica por equipos en 2008, fue emparejada con la rusa en treintaidosavos de final, primera ronda del cuadro principal.
Después de haber derrotado con claridad a Smirnova, Kharlan, cuatro veces medallista en Juegos Olímpicos, se limitó a un saludo protocolar al árbitro, evitando hacerlo con su adversaria.
Ante esa negativa a un apretón de manos, Smirnova protestó y permaneció sobre la pista durante casi una hora, negándose a irse por no haber sido saludada por su adversaria.
Negarse a saludar es sancionado con una descalificación en el reglamento de la Federación Internacional de Esgrima (FIE).
La esgrimista ucraniana se había convertido en la primera representante de su país en enfrentarse a una rusa desde la guerra de 2022, gracias a una inflexión de la política de su gobierno.
La descalificación en los Mundiales de esgrima de Kharlan es una decisión «absolutamente escandalosa», denunció un asesor cercano al presidente ucraniano Volodímir Zelenski.
«La decisión de la Federación Internacional de esgrima es la manifestación de una falta total de empatía» y es «absolutamente escandalosa», denunció en Instagram Mijailo Podoliak, antes de dar las gracias a Kharlan por haber «representado dignamente» a Ucrania en la competición.
Un decreto del ministerio de Deportes ucraniano prohibía a los atletas de sus delegaciones oficiales participar en competencias donde aparecían rusos o bielorrusos. Modificado el miércoles, el decreto abarca ahora solo a los «atletas que representan a la Federación Rusa o la República de Bielorrusia».
A su vez, el Comité Olímpico Internacional (COI) pidió mostrar «sensibilidad» hacia los deportistas ucranianos, después de la descalificación de Kharlan.
En un comunicado, el COI celebró el cambio de postura del gobierno ucraniano, que a partir de ahora defiende que los representantes de su país no puedan enfrentarse a competidores «que representen a la Federación de Rusia o la República de Bielorrusia».
Esa formulación abre la puerta a que pueda haber duelos y partidos con esos países si rusos y bielorrusos compiten bajo neutral, algo de vital importancia de cara especialmente a los Juegos Olímpicos de París-2024.
A excepción del tenis, donde los jugadores no forman parte de la delegación oficial, no había habido otros enfrentamientos entre deportistas de los dos países desde la guerra de 2022.
En primer lugar debido a la exclusión de los rusos del mundo del deporte, y después, tras su reintegración, sobre todo en la esgrima a título individual y bajo bandera neutral, por el boicot ucraniano.
La esgrima fue el primer deporte en reabrir la puerta a los rusos y bielorrusos en marzo. Tenis de mesa, canotaje o remo también siguieron las recomendaciones del COI, que había preconizado su regreso en marzo, bajo bandera neutral y a título individual.
En esgrima, 30 rusos y 51 bielorrusos recibieron en abril la catalogación de «deportista individual neutral» después del examen de sus dosieres y de la aprobación por el comité ejecutivo de la FIE.