Con la llegada de la estación de las flores, los días son más largos, aumentan las horas de exposición al sol, así como los índices de humedad. La piel no es ajena a esos factores externos. Los sí y los no de los especialistas para un rostro luminoso y saludable.
Con la llegada de la primavera, muchos aspectos del entorno comienzan a cambiar. Los días se alargan, las temperaturas suben y, en consecuencia, la piel del rostro, que es la más expuesta, se enfrenta a nuevos desafíos.
Durante el invierno, el frío, el viento y el uso constante de calefacción tienden a resecar la piel, lo que obliga a utilizar productos más hidratantes y nutritivos. Sin embargo, con el aumento de las temperaturas y la humedad, factores externos como el calor y la exposición prolongada al sol comienzan a afectar la piel de manera diferente.
Y en este contexto es clave adaptar la rutina de skincare para mantener una piel sana y radiante.
Qué cambios hay que hacer en la rutina de cuidado facial en primavera
La dermatóloga Mariangeles Jofre (MN 149457) es miembro de la Sociedad Argentina de Dermatología (SAD) y, consultada por Infobae, destacó que en esta época “las cremas hidratantes pesadas que se usan durante el invierno pueden resultar excesivas. Es el momento de optar por texturas más ligeras, como sérums o cremas gel, que permitan a la piel respirar mejor en este clima más cálido”.
Además, según la especialista, “es fundamental prestar especial atención al contorno de ojos, una zona que siempre requiere de hidratación específica”.
En este punto, cabe aclarar que cada tipo de piel tiene necesidades diferentes, y es crucial adaptarse a ellas. Las personas con piel grasa pueden beneficiarse de productos que ayuden a dar un aspecto mate, mientras que quienes tienen piel seca o muy afectada por el fotodaño deben incluir ingredientes como la vitamina C, que ayuda a combatir los signos del envejecimiento y el daño solar.
Además, “para aquellos que sufren de piel sensible o propensa a alergias, la primavera puede ser especialmente desafiante debido al aumento de alérgenos en el aire”, sostuvo la médica dermatóloga de la SAD Marilina Zabalo (MN 111660). En estos casos, según la especialista, “es recomendable utilizar jabones suaves para la limpieza y cremas hidratantes hipoalergénicas”.
En cuanto al cuidado nocturno, no es necesario hacer grandes cambios en esta época del año, más allá de continuar utilizando productos hidratantes y, si se desea, mantener el uso de productos antiage. La clave, según la dermatóloga de la SAD Verónica Tosi (MN 116620), “es utilizar cremas adecuadas para cada tipo de piel, especialmente aquellas con principios activos que trabajen durante la noche, cuando la piel se encuentra en un estado más relajado y receptivo”.
En la experiencia de Zabalo, un ejemplo de rutina de cuidado para la piel en primavera podría incluir:
- Emulsión de limpieza. Comenzar siempre limpiando la piel con un producto suave que remueva impurezas sin irritar la piel.
- Serum antiage. Sumar un suero con propiedades antioxidantes que ayude a combatir los radicales libres y a mantener la piel firme.
- Hidratación. Aplicar una crema acorde a las necesidades de cada piel.
- Protector solar. El último paso de la rutina siempre debe ser proteger a la piel de los rayos UV.
¿Hay que suspender el uso de ácidos en esta época?
Los ácidos son componentes clave en muchas rutinas de cuidado de la piel, debido a su capacidad para exfoliar y promover la renovación celular. No obstante, en primavera es crucial usarlos con precaución.
Según Jofre, “si bien los ácidos se pueden seguir utilizando durante esta estación, es fundamental aplicar protector solar cada mañana para evitar posibles irritaciones o manchas provocadas por la exposición solar”.
A lo que Tosi añadió: “Los ácidos se pueden usar en primavera, y si bien es recomendable arrancar a usarlos en invierno por la sensibilidad de la piel, pueden seguir usándose en esta temporada. Influye mucho también la exposición al sol diaria según el estilo de vida de cada uno”.
El objetivo de introducir ácidos en la rutina de skincare es prevenir el envejecimiento prematuro de la piel, reducir las manchas, mejorar la apariencia de poros, combatir el acné, mejorar la textura de la piel, disminuir arrugas y unificar el tono de la piel.
Según las expertas, “lo ideal es usarlos solo por la noche, una o dos veces por semana”. Y si alguien quiere empezar a sumar este tipo de activos en esta época, “los recomendados son los AHA (alfa hidroxiácidos), que son menos fotosensibles, permitiendo una incorporación segura en la rutina sin riesgo de hipersensibilidad al sol”.
La importancia del protector solar
Si bien los expertos coinciden en que el protector solar es el mejor anti age y su uso es importante durante todo el año, con los días más largos y una mayor exposición solar, se convierte en un paso indispensable en la rutina de cuidado de la piel.
El médico dermatólogo de la SAD Christian Sánchez Saizar (MN 97895) subrayó que es vital no solo aplicar protector por la mañana, sino también retocarlo a lo largo del día, especialmente quienes están expuestos al sol por períodos prolongados. “La radiación ultravioleta no solo causa quemaduras, sino que es uno de los principales factores que contribuyen al envejecimiento prematuro de la piel y al desarrollo de enfermedades como el cáncer de piel”, destacó.
Además, se recomienda utilizar protectores con un factor de protección solar (FPS) elevado, adaptado al tipo de piel y al nivel de exposición solar de cada persona. Para pieles más claras o sensibles, un FPS 50 puede ser necesario, mientras que para otras personas, un FPS 30 puede ser suficiente.
Un tratamiento con carbono natural, para potenciar el cuidado de la piel en primavera
Si bien hay algunos tratamientos en gabinete que conviene poner en pausa durante los meses de mayor exposición solar, como los peelings químicos, hay otros que son grandes aliados a la hora de aportar un extra de luminosidad a la piel.
Entre estos, Sánchez Saizar recomendó un tratamiento láser mínimamente invasivo que emplea un pigmento de carbono natural. Este procedimiento es conocido por su capacidad de reducir irregularidades, logrando un efecto de piel más tersa y con menos imperfecciones. Además, su efecto lifting sutil mejora el aspecto del cutis.
“Es un tratamiento ideal para esta estación, ya que combina la aplicación de una loción de carbono con la acción de un láser, que ayuda a exfoliar la piel, dejándola radiante —explicó—. Una sola sesión puede ser suficiente para obtener ese ‘efecto glow’ tan deseado en primavera”.
Finalmente, el experto enfatizó la importancia de una buena hidratación para una piel sana a largo plazo.