El joven Leandro Rodríguez, nieto del afamado actor estadounidense Robert De Niro, murió por haber ingerido pastillas que contenían fentanilo, según afirmó hoy su madre, Drena De Niro.
«Alguien le vendió pastillas que tenían fentanilo, sabían lo que estaban haciendo y de todos modos se las vendieron», contó la mujer en su cuenta de la red social Instagram. Además, puntualizó que «Por esa gente que altera esas malditas pastillas, y las vende, mi hijo se fue para siempre».
El fentanilo es un opioide sintético hasta 50 veces más fuerte que la heroína y cien veces más fuerte que la morfina. «Tan solo dos miligramos de fentanilo, la pequeña cantidad que entra en la punta de un lápiz, es considerada potencialmente letal», según los estableció la Administración de Control de Drogas (DEA).
El joven, de 19 años, fue hallado muerto por un amigo en su departamento de Nueva York, donde la policía encontró las pastillas con fentanilo y otros narcóticos.
«No merecías morir así, pero solo puedo creer que Dios necesitaba un ángel fuerte y poderoso en su ejército», escribió la mujer en sus redes.
El conocido actor, por su parte, declaró sentirse «profundamente angustiado por el fallecimiento de mi amado nieto». El domingo fue fotografiado cuando salía de su casa en el Upper East Side rumbo a la funeraria, a que acudió con Drena y Carlos Mare, padres de Leandro.