Fue en enero de este año cuando los adolescentes de 13 y 15 años fueron raptados en Villa Soldati y liberados tras el pago de un rescate de $100 mil.
Integrantes de una banda que el pasado 29 de enero secuestró a jugadores de inferiores de Argentinos Juniors fueron detenidos tras una exhaustiva investigación por parte de la Fiscalía Federal N°1.
Fue a fines de enero de este año cuando dos futbolistas de 13 y 15 años fueron raptados en Villa Soldati y liberados media hora después tras el pago de un rescate de $100 mil.
A menos de que se cumplan tres meses del hecho, la Fiscalía Federal N°1 a cargo de Ramiro González detuvo a tres sospechosos tras allanamientos.
Los capturados son tres, dos hombres y una mujer, que serán indagados en las próximas horas.
Lo curioso de este caso es que los delincuentes no eran expertos y mientras se encontraban prófugos de la Justicia cometieron varios errores que los llevaron a ser detenidos.
En la investigación se resalta que el pago del rescate se realizó por transferencia. La mamá de las víctima, en este caso hermanos, le envió $100 mil a la cuenta de Mercado Pago de K.A.T.
Otra de las cuestiones que se desprende es que después de liberar a los adolescentes, uno de los sujetos se sacó una selfie con uno de los celulares que robó y se la envió al papá de los chicos.
Aun así, lo que más llamó la atención de los investigadores es que una de las implicadas publicó en su cuenta de Facebook varias fotos con el Peugeot usado en el secuestro.
Secuestro y rescate
El lunes 29 de enero a las 11.30 ambos jugadores salieron del entrenamiento en Argentinos Juniors y en el cruce de las calles Barros Pazos y Lafuente, Villa Soldati, fueron interceptados por un Peugeot 206 de color gris.
A punta de pistola uno de los agresores los amenazó y los obligó a subirse al vehículo. Durante medio hora los secuestradores intentaron vaciarles las cuentas de MP y hasta discutieron con el papá de las víctimas.
En principio solicitaban $200 mil para liberarlos, pero terminaron aceptando $100 mil. Fue en el barrio Ramón Carrillo donde fueron liberados y trasladados por un vecino hasta el campo de entrenamiento del club.