Por primera vez de manera pública, relató su versión de los sucesos por los que denunció al futbolista. Y dijo que siente «dolor al verlo jugar».
Tamara Doldán, la mujer que denunció por abuso sexual e intento de homicidio al jugador de Boca Sebastián Villa, salió por primera vez en público a ratificar sus acusaciones y dar detalles de los hechos ocurridos el 26 de junio del año pasado en el country de Canning. «Esa noche fue terrible, me hirió en todos los sentidos», dijo, pero también fue más allá. «Siento dolor al verlo jugar», aseguró al criticar al club por mantenerlo activo y reclamó: «Lo único que le pido a Boca, y a todos, es un poco de empatía y de respeto».
La mujer contó que la noche de los hechos ambos fueron a comer un asado a un lugar donde había amigos del plantel de Boca. Cuando se retiraron del lugar, fueron a la casa de Villa. “Yo estaba bien, me fui con esta persona que tanto amaba, en quien confiaba”, contó la denunciante, quien mantuvo una relación con el jugador durante más de un año.
“Él había tomado un poco, fuimos a su casa, me tiró algún comentario machista”, dijo Doldán en referencia a las escenas de celos que detalló en su declaración judicial. Según su versión, Villa le había dicho en tono amenazante que “te gustan mis compañeros”.
Luego de que ella se desvistiera –y siempre según su relato–, comenzó el verdadero martirio: “Sentí miedo porque no sabía que me iba hacer”. “Me di cuenta, lo sentía, la sensación de tenerlo arriba mío no me la puedo olvidar”, relató Tamara. “Pensé que me iba a matar o que me iba a lastimar más todavía”, dijo.
Doldán concedió entrevistas a los canales El Trece y Telefé justo el día en que la Cámara Penal de Lomas de Zamora confirmó la fecha del comienzo del juicio oral contra Villa por una causa anterior, de otra pareja suya, Daniela Cortés, que lo denunció por violencia de género y amenazas. El delantero deberá presentarse ante la Justicia el 19 de septiembre.
“Yo quería salir todo el tiempo pero si no me calmaba no podía salir de esa habitación. Si no dejaba de llorar, de ‘hacer drama’, como dijo él”, afirmó la denunciante. Afuera golpeaba la puerta una amiga a la que Doldán mensajeó para que la ayudara. Después se enteró –dijo que por boca del amigo y mano derecha del jugador, Félix Benítez– de que también había estado la policía «alertada por los vecinos que escucharon ruidos».
Luego de que todo ocurriera, «yo no tenía más fuerzas», siguió contando y agregó que Villla le pedía que “no haga dramas”: le pedía que sonriera y que levantara la cara. “Me quería abrazar y yo no quería, ni que me toque”, explicó.
“Él me abrazaba después de todo eso. Me decía que le diga si lo quiero. Que siempre íbamos a estar juntos. El sabe que lo quiero”, comentó y señaló que “me lavé la cara y salí demacrada de ahí. Físicamente salí muy mal de ahí, en todo sentido”.
Según su relato ante las cámaras de televisión, la mujer se encontró con su amiga, pero Villa no quería que se quedara sola, entonces la perseguía por la casa, donde había más testigos. “Él quería seguir tomando hasta la 1 de la tarde, hacer un asadito al otro día”, afirmó y añadió: “En su cabeza yo me iba a quedar en la casa con él. Él de alguna forma tenía miedo de que me vaya”.
En un momento, Villa se distrajo con el guardia de seguridad y ella logró escapar en el auto de una chicas que estaban en el lugar. Juntas decidieron irse antes, al ver un clima «raro». “Me largué a llorar apenas salí de esa casa. Como que largué todo, el fingir perdonarlo, pero no conté nada a nadie”, dijo.
«Esa noche fui a un hospital porque me dolía el vientre, me costaba caminar y me daba mucha vergüenza contarle a alguien dónde me dolía, pero sabía que lo necesitaba porque estaba mal». Las médicas del Hospital Penna que atendieron al otro día del hecho a Doldán declararon que no recordaban haberla atendido, más allá de sus firmas en los registros. “Cuando fui a la guardia le iba a decir que me medique nomás. Y la médica me dijo que si no le contaba, no me iba a poder ayudar. Cuando me revisó se dio cuenta sola. Me preguntó si había sufrido una violación. Me dijo que tenía signos de una violación: ‘Esto es una violación, mamita’. Cuando dijo la palabra me quebré”, recordó Doldán. La médica le recomendó hacer la denuncia pero ella en ese entonces decidió no preesentarla.
Una semana después, la joven se vio de nuevo con Villa: en su testimonio, dijo que el jugador y su entorno la llamaban «todo el tiempo». «Yo tenía la esperanza de entender el porqué del hecho y por eso fui al lugar a encontrarme con él, pero cuando lo vi no encontré respuestas», señaló.
La mujer agregó que Villa trató de manipularla hasta un punto donde se sintió culpable por denunciarlo: ”Sebastián sabe que fue grave lo que hizo, porque todo el tiempo me pedía perdón”, dijo.
La denunciante también contó que el jugador intentó sobornarla: «Me ofrecieron 5000 dólares. Félix, que es su mano derecha y amigo, me dijo del dinero para borrar todo. Además me quisieron presionar. Me pidieron los nombres de los médicos que me habían atendido en el hospital Penna. Para mí, son como una mafia gigante”, expresó.
La semana pasada, el juez de Garantías Javier Mafucci Moore rechazó el arresto del jugador, una medida que había pedido la fiscal del caso.
Ayer, Tamara Doldán se mostró consternada: «Sientodolor al verlo jugar», sostuvo y pidió empatía al club ante la situación: “Yo no puedo decidir. Lo único que le pido a Boca, y a todos, es un poco de empatía y de respeto. ¿Por qué lo tienen que inflar tanto? Por lo menos, no sé, que sean un poco más empáticos”.
Fuente: Página 12