Un profundo pesar atraviesa al ambiente hípico tras la muerte de Miguel Córdoba, un joven jockey de solo 19 años que perdió la vida este domingo durante una competencia en el hípico de Añatuya, ciudad ubicada en el departamento General Taboada, en la provincia de Santiago del Estero.
El accidente ocurrió cuando, en plena carrera, Córdoba cayó del caballo que montaba y fue aplastado por el animal, sufriendo lesiones de extrema gravedad. Fue asistido de inmediato y trasladado de urgencia al hospital zonal, donde los profesionales realizaron intensas maniobras para salvarlo. Lamentablemente, su estado era crítico y no logró sobrevivir.
El caso volvió a poner en evidencia el alto riesgo que implica el mundo del turf, donde los jinetes se exponen a caídas violentas, aplastamientos, golpes a gran velocidad y maniobras peligrosas que pueden resultar fatales. Se trata de una práctica profundamente arraigada en muchas comunidades, pero que conlleva un nivel de peligro extremo para quienes participan.
