Un médico y una enfermera que se encontraban en el lugar intentaron reanimarlo, pero no lo lograron.
Un hombre de 43 años de nacionalidad argentina murió ahogado en una playa de España y encontraron su cuerpo flotando en la orilla del mar. Cerca de él, estaba su suegro, de 67 años, quién también permanecía inconsciente en el agua, sin embargo, después de practicarle maniobras de reanimación, a él sí pudieron salvarlo.
El hecho ocurrió este sábado en Berellín, localidad de Prellezo, en Cantabria. Cerca de las 14 (hora local) avistaron los cuerpos y dieron aviso a las autoridades. Mientras que un médico y una enfermera que se encontraban descansando en la arena, intervinieron para brindarle los primeros auxilios pero no lograron reanimarlo.
La Policía Civil acordonó la zona para retirar el cuerpo y el operativo finalizó cerca de las 17 cuando lograron retirarlo. Mientras que el sobreviviente fue trasladado en helicóptero a un hospital de la zona para recibir la asistencia médica correspondiente.
Aunque desde el gobierno de Cantabria no brindaron información oficial sobre la tragedia, el testigo que colaboró para sacar los cuerpos del agua, José Carlos Monfort, relató a El Diario Montañés de España lo que sucedió.
El relato de un testigo que presenció la tragedia
Según precisó Monfort, un grupo de cinco personas, compuesto por dos mujeres y tres hombres, estaban en el agua cuando la corriente los arrastró. Las mujeres lograron salir por sus propios medios, mientras que dos de los hombres más jóvenes acudieron en ayuda de un tercero, de mayor edad, para tratar de sacarlo del agua.
Finalmente, uno llegó a la orilla pero los otros dos quedaron en el agua. Tal como relató el testigo, las personas que estaban en la orilla se organizaron para hacer una cadena humana para rescatar los cuerpos. Una vez que lograron llevarlos a la orilla, les realizaron maniobras de reanimación, pero uno de ellos ya había muerto.
Cabe mencionar que la playa de Berellin no cuenta con guardavidas y los carteles instalados en la zona lo advierten, así como también se informa a los bañistas que es una zona con corrientes acuáticas frecuentes. Sin embargo, durante este sábado el agua estaba potencialmente peligrosa: “El mar estaba muy mal, había olas grandes y corrientes”, concluyó Monfort.