El delantero brasileño Vinicius, afectado por una molestia en la rodilla, no jugará mañana ante Sevilla por la fecha 37 de LaLiga de España, según lo adelantó hoy el entrenador del equipo, el italiano Carlo Ancelotti.
En ese sentido, el italiano Ancelotti aclaró que la baja de Vinicius se debe a su lesión y no está vinculada a un deseo de protegerlo a falta de sólo dos partidos para el final de la temporada, luego de los insultos racistas que recibió el brasileño el domingo pasado en Valencia, que derivó en sanciones para el club de Mestalla.
«La rodilla lo sigue molestando. Da igual que el partido sea fuera de casa o en casa, no puede jugar y punto», dijo el italiano con la intención de desvirtuar por completo la sospecha de que el brasileño fue preservado por la polémica.
«Vinicius no viaja porque no puede jugar, si tuviera una posibilidad de jugar, viajaría e intentaría jugar», aseguró Ancelotti poniéndole fin a los rumores, consignó el periódico deportivo español Marca.
El futbolista recibió insultos racistas y fue tildado, entre otras cosas de «mono» por lo hinchas del Valencia en el cotejo que Real Madrid jugó en el Estadio de Mestalla ante el local en la fecha pasada.
Luego del acoso por parte de un grupo de ultras, el futbolista reaccionó, le aplicó un golpe al jugador Hugo Duro del Valencia y fue expulsado.
El comité disciplinario de la Liga resolvió castigar al Valencia con el cierre parcial del estadio durante cinco fechas y una multa de 45.000 euros. La pena puede ser apelada por los valencianos, que ya prometieron la expulsión de por vida de los aficionados culpables del ataque.
Al mismo tiempo, la Federación Española anuló la expulsión de Vinicius, que quedó habilitado para jugar ya que «considera probado que, tal y como reflejó el árbitro en su acta, hubo gritos racistas a Vinicius durante el mencionado partido, alterando el normal desarrollo del mismo y considerándose las infracciones muy graves». (Télam)