Ángel Pascual Ramos, Lautaro Dante Ciongo Pasotti, Steven Alexis Cuzzoni, Franco Jesús Lykan, Thomas Fabián Domínguez e Ignacio Retondo se encuentran imputados y con prisión preventiva.
Acasi cinco meses de la violación grupal de una joven de 21 años ocurrida en el barrio porteño de Palermo, por la tarde, el fiscal Eduardo Rosende pidió que los detenidos vayan a juicio oral por «abuso sexual con acceso carnal agravado por la intervención de dos o más personas» y por las «lesiones ocasionadas a un testigo».
Rosende argumentó que Ángel Pascual Ramos (23), Lautaro Dante Ciongo Pasotti (24), Steven Alexis Cuzzoni (20), Franco Jesús Lykan (23), Thomas Fabián Domínguez (21) e Ignacio Retondo (23) -quienes permanecen imputados y con prisión preventiva- tienen la misma responsabilidad ya que «actuaron pergeñando un plan previo, con acuerdo de voluntades y roles», cuyo fin era «turnarse para mantener relaciones» con la joven.
Para el fiscal, todos ellos procedieron «en aras de satisfacer sus deseos libidinosos con una víctima que no estaba en condiciones de dar ningún consentimiento, ya que tenía alcohol, marihuana y anfetaminas en su organismo».
«Ese era el plan común, mantener relaciones sexuales con ella todos al mismo tiempo, en la medida de lo posible, a cuyo fin debían turnarse para hacerlo algunos primero y el resto después, pero siempre varios al mismo tiempo, aprovechándose de la vulnerabilidad de la víctima a nivel volitivo», sostuvo.
Así lo comunicó la agencia Télam que tuvo acceso al requerimiento de elevación a juicio que el fiscal presentó ante el juez de la causa, Marcos Fernández, del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 21.
El delito por el que los acusa ante la solicitud a juicio oral estima una pena de 8 a 20 años de cárcel, mientras que la de «lesiones leves» (por la agresión al testigo) correspondería de un mes a un año de prisión. Ambas causas en concurso real y en calidad de «coautores».
El delito fue cometido el lunes 28 de febrero por la zona porteña de Palermo Soho, en la calle Serrano al 1300. En ese momento una pareja, dueña de una panadería, y un vecino intervinieron al notar el abuso a la joven dentro de un Volkswagen Gol estacionado junto a la vereda. Allí, Domínguez y Retondo, cantaban y tocaban la guitarra a modo de «campana».
Fuente: FiloNews