«Nacimos como una fiesta y nos convertimos en un proyecto internacional», dijo a Télam, el estadounidense Grant C. Dull, uno de los fundadores del sello que tiene tiene 80 álbumes editados, 20 documentales, 375 artistas musicales y visuales y proyectos en Argentina y otros países.
La crisis política y social de 2001 incidió en diferentes espacios culturales y así como alentó expresiones del cine político insurgente o proyectos de televisión comunitaria, también movilizó a artistas con estéticas de vanguardia, atravesados por la electrónica, ya sin una definición política: en ese contexto nació el sello ZZK Records, que cumplió 15 años, y reúne hoy a artistas de escala internacional con millones de clics en internet.
La Chancha Vía Circuito, La Yegros, Nicola Cruz, Ghetto Cumbe y Son Rompe Pera son algunos de los artistas de esa escena que combina el pulso de la electrónica, la pretensión futurista y las formas musicales locales.
«Nacimos como una fiesta y nos convertimos en un proyecto internacional», sintetizó a Télam el estadounidense Grant C. Dull, «un gringo trotamundos» que es uno de los fundadores del sello.
«En el contexto de la crisis de 2001 hubo un giro de los artistas hacia búsquedas más locales. Y esa relación con los músicos folclóricos argentinos funcionó muy bien y fue cada vez más creciente», explicó Grant C. Dull.
La expresión mayor de esa relación, bajo el registro de la electrónica, y de las potencialidades de difusión que capitalizó ZZK Records fue la versión de «Quimey Neuquén», obra del repertorio tradicional de José Larralde, por el productor, compositor y DJ platense Pedro Canale (conocido con el nombre Chacha Vía Circuito), que se utilizó en un capítulo de la serie «Breaking Bad».
«Yo creo que el baile es algo que en tiempos buenos y en tiempos difíciles no paramos de hacer. En tiempos difíciles el baile es aún más importante porque de alguna manera tenemos que sacar todo con el cuerpo y el espíritu y no hay nada mejor que bailar. Salir a bailar en momentos de crisis es una forma de resistencia», opinó Dull.
«El baile es algo que en tiempos buenos y en tiempos difíciles no paramos de hacer. En tiempos difíciles el baile es aún más importante porque de alguna manera tenemos que sacar todo con el cuerpo y el espíritu y no hay nada mejor que bailar. Salir a bailar en momentos de crisis es una forma de resistencia»
En aquel contexto otros proyectos adoptaron posiciones estéticas y políticas más radicales. El Grupo Cine Insurgente, la llamada «TV Piquetera» que luego se derivó en experiencias de televisión digital, el Grupo de Arte Callejero, el Grupo de Cine Alavío, entre más, promocionaron nuevos espacios culturales vinculados con proyectos de emancipación política. Pero la escena era más amplia.
«Nosotros empezamos con fiestas. Nos dimos cuenta muy rápidamente de que lo nuestro era muy original, innovador y que despertábamos el interés de productores y medios en otros países que nos empezaron a contactar. En ese momento nació el sello», recordó Grant C. Dull.
«Fue la reunión de un trotamundos texano que gestionaba una web de cultura; Villa Diamante, un DJ conectado con el mundo del cine y del arte y DJ NIM, un vegano rasta con una inclinación a estéticas urbanas», completó.
Sin las restricciones de las tradiciones y armados con software de producción digital, en esas fiestas se mezclaban elementos de dancehall, bass music, hip hop, IDM e incluso el folclore tradicional. Una variante electrónica de cumbia – que llegaron a denominar cumbia digital – fue el primer producto del grupo.
El éxito de Chancha Vía Circuito y La Yegros, una argentina que tuvo suceso en Europa con su disco «Viene de mí», en 2013, ayudaron a consolidar el camino y sumar artistas de otras partes del mundo.
Tras 15 años de recorrido, ZZK Records (Zizek Records en sus inicios) tiene 80 álbumes editados, 20 documentales, 375 artistas musicales y visuales y proyectos en Argentina, Bolivia, Perú, Colombia, Ecuador, Venezuela, México, Francia y Estados Unidos.
«Nuestra ventaja es que siempre supimos capitalizar internet al máximo en relación a la difusión«, destacó Grant C. Dull, interpelado por el estado de la industria de la música y la capacidad de adaptación de productores y sellos tradicionales.
Y concluyó: «Siempre buscaremos artistas nuevos y sonidos locales, con el ojo en la innovación, en ese sentido mantenernos fieles a la génesis es lo que nos permitirá irnos renovando». Télam