El conductor de Argenzuela expuso la situación familiar tras las declaraciones públicas que brindó su hija mayor.
El periodista Jorge Rial aseguró en Duro de Domar que las declaraciones que realizó su hija mayor, Morena Rial, afectaron a la hermana, Rocío. Además, aclaró que comenzó acciones legales contra América: «Estoy en juicio por el canal porque me molestó que se explotó por 10 días la vulnerabilidad de Morena».
«Todo tiene solución, sobre todo porque va a ser mi hija toda la vida y la voy a amar toda la vida. Sí me produjo un dolor inmenso, injusto. A mí me afectó, pero estoy más curtido, lo peor es que afectó más a mi otra hija, Rocío», explicó el conductor de Argenzuela.
En la misma línea, el comunicador expuso su reacción tras escuchar las palabras de su hija mayor: «Fue muy cruel en hablar un montón de cosas. Lo peor de todo no es Morena, porque no es la primera vez que habla de esta manera, la entiendo y sé todo. Lo peor es lo que hicieron uso y abuso de la falencia. Fue lo que más me dolió, gente que conoce la historia».
Durante la entrevista con Pablo Duggan y el panel de DDD, Rial fue consultado por su relación con Luis Ventura, quien fuera su compañero en Intrusos: «Ya accioné contra él. Ventura se terminó transformando en un meme de él mismo. Yo no me peleo con él, nunca me vas a encontrar peleándome con él, que es lo que se busca. Vengo casi de morirme, salvo lo de mi hija que es importante, lo de alrededor es decorado».
«Vi la famosa luz blanca en un túnel cuadrado»
El sábado 29 de abril, Jorge Rial sufrió una descompensación cardíaca mientras se encontraba de vacaciones en Colombia. En Duro de Domar explicó la difícil situación que le tocó atravesar: «Tuve muerte súbita durante 10 minutos. Ahí tuve un enfermero dándome masaje cardíaco, tres descargas eléctricas y me dieron una inyección de adrenalina directa al corazón. Aunque muchos no lo crean, estuve muerto».
Una de las consultas que recibió el conductor radial y televisivo fue acerca de la vivencia que transitó en ese momento: «Vi la famosa luz blanca en un túnel cuadrado con 500 mil luces. Era muy calentito y pacífico. Vi en primer plano mis manos yéndose hacia el fondo, con mucha paz. Cero miedo y de golpe se fueron, y volví».