La IA generativa podría transformar millones de empleos en América Latina, pero la brecha digital sigue siendo un gran obstáculo. Oportunidades y desafíos.
La Inteligencia Artificial Generativa (IAG) está emergiendo como una fuerza transformadora para el mundo laboral, y América Latina no es la excepción.
Un reciente estudio conjunto de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y el Banco Mundial revela que la IAG tiene el potencial de mejorar la productividad en hasta 17 millones de empleos en la región, pero advierte sobre un obstáculo significativo: la brecha digital.
El informe titulado «La IA generativa y los empleos en América Latina y el Caribe: ¿La brecha digital es un amortiguador o un cuello de botella?» sostiene que entre el 26% y el 38% de los empleos en la región podrían verse influidos por esta tecnología. Sin embargo, la realidad es que esta influencia podría ser una espada de doble filo.
«Si bien la IA tiene el potencial de mejorar la productividad y transformar empleos, la falta de acceso a tecnologías digitales podría limitar significativamente estos beneficios,» afirma Ana Virginia Moreira Gomes, Directora Regional de la OIT para América Latina y el Caribe.
El impacto de la brecha digital es particularmente preocupante en un contexto donde la desigualdad económica y la informalidad laboral ya son problemas persistentes.
Según el informe, los trabajadores en sectores formales, urbanos, más jóvenes y educados tienen más probabilidades de beneficiarse de la IAG.
Sin embargo, estos beneficios no están garantizados para todos. La mitad de los empleos que podrían ser más productivos gracias a la IAG —alrededor de 17 millones— se ven obstaculizados por la falta de acceso adecuado a la infraestructura digital.
La situación es aún más crítica para los trabajadores que viven en condiciones de pobreza. En Brasil, por ejemplo, sólo el 40% de los trabajadores desfavorecidos podrían beneficiarse de la IAG debido a la falta de uso de tecnologías digitales en su trabajo, según el informe de la OIT y el Banco Mundial.
Un futuro laboral en transformación
Pese a los desafíos, la IAG no solo representa una amenaza. Jaime Parra Milic, Director Regional de Media & Creatives Data Lab en CSA Latam, destaca que «lejos de eliminar puestos de trabajo, la tecnología puede ser un catalizador y aliado para la evolución del empleo.»
Esto es especialmente relevante en sectores como el de la tecnología de la información y las comunicaciones, donde la demanda de trabajadores con habilidades técnicas avanzadas está en aumento.
Los gobiernos de la región tienen un papel crucial en este proceso. La implementación de programas de formación continua y la promoción de la educación en ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM) son esenciales para preparar a la fuerza laboral para un futuro en el que la IA jugará un papel central.
Asimismo, mejorar la infraestructura digital y la conectividad es vital para que todos los trabajadores puedan acceder a las oportunidades que ofrece la IAG.
Un llamado a la acción: Hacia una integración digital inclusiva
El estudio enfatiza la necesidad de políticas colaborativas que permitan a América Latina aprovechar plenamente el potencial de la IAG mientras se mitigan los riesgos asociados.
“En una región donde el crecimiento es bajo y la desigualdad sigue siendo inaceptablemente alta, es fundamental mejorar la productividad y la calidad del empleo,» asegura William Maloney, Economista Jefe del Banco Mundial para América Latina y el Caribe.
Es claro que para que la IAG sea una herramienta de desarrollo en lugar de un factor de desigualdad, los gobiernos deben actuar con rapidez y decisión.
Invertir en conectividad, habilidades digitales y fortalecer los sistemas de protección social no es solo una recomendación; es una necesidad imperiosa para garantizar que nadie se quede atrás en la era de la Inteligencia Artificial Generativa.