En la mañana de este viernes se dio continuidad al juicio por delitos de Lesa Humanidad en contra del exmilitar, durante la dictadura sangrienta. Este viernes declaró Maza como testigo.
A pregunta de la Fiscalía, Maza contó todo lo ocurrido durante la dictadura militar de la cual fue víctima, siendo presa política. “En mi caso tengo que empezar a contar que en noviembre del 75 neustra familia comenzó a sufrir allanamientos por parte del Ejercito y de la Policía provincial”, indicó primero.
“En uno de los allanamientos fueron a buscar a Jorge, mi hgermano que quedó detenido”, recordó.
“En una oportunidad, cuando mi padre viajó mi madre sospechando nos llevó a la casa de mi tía, y los vecinos fueron a decir que no podíamos regresar si no me presentaba yo ante el Ejercito. En ese contexto y había sucedido la muerte de los curas, y el asesinato de Wenceslao Pedernera ”, dijo.
El por entonces capellán le indicó a su padre que ella no iría detenida por ser menor de edad, y que estaría en el Ejército ante su declaratoria. “Cuando llegué, el capellán no existió nunca, nos atendió Malagamba y me hizo preguntas si conocía a gente, y como había contestado diciendo que conocía a más de tres personas, quedé detenida por ‘asociación ilícita’. Me subieron a un falcon verde, con militares, armas, y fui trasladada a un centro clandestino de detención, que fue el instituto de rehabilitación social, la cárcel de La Rioja donde fui llevada, a un sector, me hicieron pasar y me introdujeron en una habitación de higiene”, relató.
«En esa situación escuchaba el nerviosismo que causaba cuando llegaba Britos a la Cárcel», sostuvo.
Aseguró que las celadoras no permitían que tenga comunicación con las otras detenidas. Luego la trasladaron ante Reynaldo Sánchez, el exdirector del penitenciario, también condenado por delitos de Lesa Humanidad.
«Me pasaban por el cuerpo una pluma diciéndome que declare», dijo y quebró en llanto la exsenadora, y diputada nacional MC.