Cada 14 de septiembre en toda la región de América Latina y el Caribe se conmemora desde 1990 esta fecha, que busca reivindicar la primera emisión del programa radial brasilero, “Viva María”; producido y conducido por la periodista Mara Régia Di Perna.
Pionero en su tipo y para la época, el programa “Viva María”, tocaba temas centrales con perspectiva de género y comenzó a ser emitido el 14 de septiembre de 1981. En el mismo año en Argentina, se lleva a cabo en la ciudad balnearia de San Bernardo, el V Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe. En ese marco, y en honor a este programa, se decide crear y celebrar el “Día de latinoamericano de la imagen de la mujer en los medios”.
Por Matías David Rodríguez para SUDAKA TLGBI
Luego de casi diez años al aire, el programa radial “Viva María”, es levantado del aire por orden del gobierno de Fernando Collor de Mello. Sin embargo, reanudará sus transmisiones hasta la actualidad, con más de 30 años de trayectoria, en la lucha de las mujeres brasileñas por sus derechos.
En una visita que la periodista brasilera Mara Régia Di Perna realizó a la Argentina en el año 2014, y en el marco de un reconocimiento que la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual preparo para dicha ocasión, ella señalo: “Viva María nació para quebrar el silencio frente a la violencia, el silencio es cómplice de la violencia. Enfrentó los años de plomo, ganó piernas y se transformó en una caja de resonancia del movimiento de mujeres de todo Brasil”.
La conmemoración, propone visibilizar a las mujeres en toda su diversidad cultural, étnica, social y económica. A su vez, persigue el objetivo de mostrar y denunciar la discriminación y las violencias que sufren las mujeres en los medios de comunicación.
Esta fecha insta a los medios a proyectar una imagen de la mujer libre de estereotipos, pero es evidente que la misma está impregnada de una mirada cis-biologicista, que deja por fuera a otros tipos femineidades, como somos las travestis y trans.
Si bien, debemos situarnos en la época en la que se comenzó a conmemorar, es evidente que la misma debería actualizarse a los tiempos que corren.
Los medios, al igual que instituciones como las escuelas y la familia, son transmisores de modelos culturales de lo que se considera femenino y masculino en nuestra sociedad, en determinado momento histórico. Por eso, consideramos necesario implosionar la manera de entender este “Día de la Imagen de la Mujer en los Medios”, proponiendo incluir en este festejo a todos los tipos de femineidades existentes.
Es de destacar, los proyectos que se presentaron en ambas cámaras del Congreso de la Nación, sobre la “paridad en los medios de comunicación”; como también la reciente creación del Gabinete Nacional para la Transversalización de las Políticas de Género. La cual, asumirá las tareas de incorporar la perspectiva de género en todas las políticas públicas del Estado Nacional.
En este marco, no podemos solo hablar de la “Imagen de la Mujer en los Medios”, cuando se está garantizando la perspectiva de género y diversidad como política de Estado. Políticas, que van en sintonía con los compromisos internacionales asumidos por la Argentina, que la ponen a la vanguardia una vez más, en América Latina y el mundo.
Es necesario, revisar las categorías con las que nombramos el mundo, porque lo que no se nombra no existe. Sobre todo, en un contexto donde se debaten leyes que proponen garantizar la paridad en los cargos y representación mediática de los géneros, desde una perspectiva de diversidad sexual.
Estos prevén transformar los medios audiovisuales de todo el país. Los cuales deberán cumplir -según consta en el proyecto de ley presentado por la diputada Gisela Marziotta- con la paridad, mediante la contratación de mujeres (cis, trans travestis) “en todas sus estructuras organizativas internas: gerencia, técnica, conducción, producciones, toma de decisiones”. Es decir, en todos los estratos de la estructura de los medios, sus diferentes niveles y aplicarse en todos los roles.
Este mismo proyecto, establece un mínimo del 3 % de cupo para personas travestis y trans. De convertirse en ley, la normativa alcanzaría a todos los medios inscriptos en el Registro de Señales y Productoras del Ente Nacional de Comunicaciones.
Estas herramientas, de seguro serán indispensables para generar un periodismo más justo, comprometido y humano. Teniendo en cuenta el contexto actual, donde la violencia mediática y simbólica se ha recrudecido hacia las identidades de género y orientaciones sexuales diversas.
Es imposible construir una sociedad con más justicia social, si los medios masivos de comunicación -quienes generan agenda e influyen en la opinión pública- no se comprometen con reflejar las transformaciones sociales que se están llevando adelante.
Muestras de ello, son las incorporaciones de la periodista trans Alejandra Malem al canal C5N, o de Diana Zurco en el noticiero de la TV Pública. También de Celeste Giachetta en Radio Nacional de Córdoba y de la incorporación a la grilla de radio provincia de Buenos Aires, de SUDAKAS en RADIO, el primer programa en una emisora pública; producido y conducido por comunicadorxs travestis, trans y de géneros no binarios.
A su vez, a un mes de asumir este nuevo gobierno nacional, se designó en las emisoras “hermanas” de Radio Nacional a: Mavi Díaz como directora de Nacional Folclórica; a Mikki Lusardi en Nacional Rock y a Andrea Merenzón en Nacional Clásica. Además, la designación de Rosario Lufrano, como presidencia de Radio y Televisión S. E. y a Bernarda Llorente, al frente de la agencia Télam.
La posición de estas mujeres, demuestra un cambio de paradigma, que es el reflejo de la lucha de los feminismos y transfeminismos en la sociedad. La importancia de una mujer dirigiendo por primera vez en la historia la agencia Télam, se noto desde un principio. Desde que asumió Bernarda Llorente, conformó un directorio exclusivamente de mujeres, transversalizo la perspectiva de género en la redacción del medio. A su vez, incluyo capacitaciones en lenguaje inclusivo a les trabajadores del medio, incorporó los aportes de la Ley Micaela y creó la edición de Géneros y Diversidades.
Sin embargo, también hay que decir que siempre queda la deuda con los medios privados, los medios hegemónicos. Y sobre todo los medios gráficos en sus versiones de papel y virtual. Los cuales tiene un gran alcance y son formadores de opinión. Los mapas de medios que muestran los monopolios que se han conformado, dan una idea de lo que estamos hablando.
De esta situación dio cuenta la Defensora del Público, Miriam Lewin, quien puso de manifiesto en una reunión Bicameral que esta regulación debería alcanzar también a los medios privados. En dicho encuentro, habló de establecer como requisito para que accedan a la pauta oficial los medios privados, cumplir con los tres ejes de: paridad/equidad, protocolos y Ley Micaela. La preocupación de la Defensora, se debe a que ya hubo compromisos asumidos por parte de los medios privados con anterioridad, y cuando cambian las gestiones quedan en la nada.
El “Día de la Imagen de la Mujer en los Medios”, se vuelve trascendental, en un contexto donde se debate la perspectiva de género como horizonte para una sociedad más equitativa y diversa. Sin embargo, quedan muchos desafíos por delante.
Fuente: Sudaka