Jeffrey Piccolo reclamó una compensación superior a los 50 mil dólares.
Disney solicitó que se desestime la demanda por la muerte de una médica a causa de una reacción alérgica en uno de sus parques porque su viudo se suscribió a la plataforma de contenidos Disney+ en 2019.
El 22 de febrero pasado Jeffrey Piccolo denunció a la compañía por negligencia médica y reclamó una compensación superior a los 50 mil dólares.
El 31 de mayo el gigante norteamericano explicó ante el tribunal del circuito del condado de Orange, Florida, que el acuerdo de la suscripción al streaming que el esposo de la víctima firmó en su PlayStation exigía que cualquier disputa, con excepción de las reclamaciones menores, se «resuelva mediante arbitraje individual vinculante».
La compañía sostiene que Piccolo aceptó un lenguaje similar cuando usó la aplicación “My Disney Experience” para comprar boletos para visitar el parque temático Epcot en septiembre del año pasado, un mes antes del desafortunado viaje.
Al mismo tiempo, la empresa señaló que ambos acuerdos requerían que Piccolo aceptara el lenguaje del arbitraje antes de comprar, según consta en los documentos judiciales.
Los abogados de Piccolo definieron el último recurso de Disney como “absurda” y “escandalosamente irrazonable”, de acuerdo a New York Post.
“La idea de que los términos acordados por un consumidor al crear una cuenta de prueba gratuita de Disney+ prohibirían para siempre el derecho de ese consumidor a un juicio con jurado en cualquier disputa con cualquier filial o subsidiaria de Disney es tan escandalosamente irrazonable e injusta que conmociona la conciencia judicial, y este tribunal no debería hacer cumplir tal acuerdo”, añadieron los letrados en un escrito.
El caso
El deceso de Kanokporn Tangsuan, médica de la Universidad de Nueva York, se produjo el 5 de octubre de 2023 cuando junto a su esposo concurrieron a Raglan Road Irish Pub en Disney Springs.
En el restaurante del parque, la víctima le informó al mozo que no podía consumir ningún alimento que contenga frutos secos y productos lácteos.
En este sentido, la profesional de la salud le insistió al empleado que le consulte al chef sobre si estaba la posibilidad de cocinar alguna comida libre de alérgenos.
Luego de que el camarero le confirmó que había comidas aptas para su ingesta, la mujer pidió buñuelos, vieiras y aros de cebolla.
Todo transcurrió sin problemas hasta que 45 minutos después de abandonar el restaurante se desplomó sobre el piso al sufrir una severa dificultad para respirar.
De forma inmediata se autoadministró una inyección de epinefrina para aliviar el problema y fue hasta un hospital para ser atendida.
Tiempo más tarde el esposo de Tangsuan recibió la triste noticia de que su mujer había fallecido tras padecer una “anafilaxia debido a niveles elevados de lácteos y frutos secos en su organismo”.
NA