Una jueza de la Ciudad de Buenos Aires autorizó que un recién nacido sea inscripto como hijo de una pareja de varones y una mujer.
Una pareja de varones y una mujer tuvieron un bebé en mayo de este año, y por primera vez en el país, se permitió que el recién nacido sea inscripto en el Registro Civil de la República Argentina con una triple filiación —es decir, con sus dos papás y su mamá— desde su llegada al mundo.
Se trata de un caso sin precedentes por la novedosa sentencia, dado que la jueza Myriam Cataldi, al frente del Juzgado Nacional en lo Civil Nº7 de la ciudad de Buenos Aires, reconoció el «derecho a la no discriminación con motivo o razón de la triple filiación o poliamor registral filiatorio» para el bebé.
Para lograr esto, la magistrada dio lugar a la solicitud de los papás y la mamá y declaró inconstitucional el último párrafo del artículo 558 del nuevo Código Civil y Comercial, que entró en vigencia desde el 2015, que dice que “ninguna persona puede tener más de dos vínculos filiales, cualquiera sea la naturaleza de la filiación”.
Justificó su decisión al determinar que ese párrafo quebrantaba los derechos de la Constitución Nacional y los tratados internacionales de derechos humanos. Quienes se opusieron a la solicitud de esta familia fueron la fiscal Mónica Susana Mauri y el Defensor de los Menores Marcelo Gustavo Jalil.
Cataldi argumentó que falló a favor del «derecho a conformar una familia en términos diversos y plurales». Además, añadió que la Corte señaló en la Convención Americana que «no se encuentra determinado un concepto cerrado de familia» y que «muchos menos se protege solo un modelo en particular de la misma«.
«La realidad demuestra cotidianamente que no en toda familia existe una figura materna o una paterna, sin que ello obste a que esta pueda brindar el bienestar necesario para el desarrollo de niños y niñas. La paternidad y la maternidad no deben ser solo conceptos objetivos y estáticos, en donde el componente afectivo resulte jurídicamente irrelevante», concluyó.
En tanto, el fallo destaca que el bebé «fue procreado en laboratorio uniendo el gameto de uno de los hombres y el de la mujer». Este resultado fue producto del deseo de una pareja de dos hombres, que conviven desde el 2018 y querían tener un hijo, sin recurrir a la adopción o a la gestación por subrogación. Por ello, optaron por un «modelo de coparentalidad» con una mujer que también tenía el mismo deseo de formar una familia.
Un fallo histórico
En diálogo con GO Noticias, el abogado de los dos padres, la madre y el recién nacido, Andrés Gil Domínguez, explicó que según su experiencia con otros pedidos de triple filiación, «era totalmente posible» que el caso concluyera de manera favorable.
Además, indicó que si bien ya existían previamente «19 casos en la Argentina» de triple filiación, una de las novedades de este caso es que se trata del primero en el cual el proyecto parte de «un vínculo familiar y creacional conjunto» desde el nacimiento.
“Hubo muchas conversaciones sobre la manera de crianza, el funcionamiento de la familia y cuestiones que eran importantes para cada uno. Estas íntimas conversaciones favorecieron la conformación de un entramado familiar sólido, puesto que compartían los mismos valores, estilos de crianza y, fundamentalmente, plan de vida. En uno de los encuentros decidieron formar la familia que los tres deseaban. Estuvieron de acuerdo en una familia con una mamá y dos papás. Un proyecto familiar donde el hijo o hija crecería en dos hogares distintos, con mucho amor de familia y amigos y amigas de sostén para el nuevo integrante”, explicita el novedoso fallo.
El caso
Cuatro años atrás, la pareja de varones se dispuso a buscar una candidata que deseara formar una familia con ellos, ya que querían tener un hijo, pero sin recurrir a la adopción o la subrogación de vientre. Fue así que dieron con un sitio web especializado que les permitió conocer a la futura madre de su bebé.
Si bien la pandemia del coronavirus atravesó sus planes, mediante videollamadas e intercambios virtuales consiguieron mantener un vínculo con la mujer y se generó un fuerte lazo de confianza y respeto entre ellos. Y la iniciativa dio sus frutos: con el fin de las restricciones sanitarias y tras una serie de encuentros presenciales, llevaron adelante el procedimiento del embarazo, y durante el proceso de gestación, llevaron el caso a la jueza Myriam Cataldi como «una idea novedosa, original y disruptiva».
Un antecedente
En abril del 2015, un bebé nacido en la provincia de Buenos Aires se había convertido en el primero de la Argentina y de Latinoamérica en ser registrado en su partida de nacimiento con el reconocimiento de «triple filiación», es decir, con el apellido de su padre y de sus dos madres.
Sin embargo, en ese caso, tras su nacimiento, el bebé había sido inscripto en el Registro Civil solamente «con los dos apellidos de sus madres», según había señalado el entonces jefe de Gabinete provincial, Alberto Pérez.
«Pero cuando esta familia nos acercó el pedido, entendimos al igual que ellos que Antonio -el niño- tiene derecho a que su realidad familiar sea respetada y a ser reconocido como hijo de sus dos mamás y de su papá, sin que ninguno de ellos tenga que resignar sus derechos y obligaciones», afirmaba.
Fuente: Página 12