Salir a correr con frío no es imposible si se tienen en cuenta ciertos recaudos.
En invierno, las bajas temperaturas y los días con menos tiempo de luz solar lleva a que los runners tengan menos motivaciones a la hora de salir a correr, aunque hay muchos beneficios.
Esta etapa del año se puede aprovechar una serie de factores que potenciarán la preparación de los corredores de cara a futuras competencias, como también se puede disfrutar del running sin padecer el calor, por ejemplo.
Al mismo tiempo, entrenar en esta etapa del año forja hábitos saludables. Aquellos corredores que no dejan de lado la rutina, tendrán una mejor conducta y mayores fortalezas ante las adversidades que ocurren durante las carreras. El correr y salir de la zona de confort generará muchas más ventajas.
Los beneficios
El entrenar en invierno permite aumentar la resistencia, y es ideal, gracias a la temperatura, para proyectar entrenamientos de fondo o prolongados, lo que potenciará el rendimiento de cada uno en las carreras.
Por ejemplo, el planificar una preparación para correr una maratón se vuelve ideal, gracias a que las temperaturas favorecen evitando padecer de los entrenamientos o trabajos específicos.
A su vez, salir a correr en esta época permite aumentar la resistencia, ya que al cuerpo le cuesta menos mantener la temperatura equilibrada y cerca de los 37 grados. Esto significa que los entrenamientos de varios kilómetros se vuelven más fáciles de realizar que en verano.
Aparte, por lo general, en épocas frías hay menos exposición al sol, lo que reduce los niveles de vitamina D. Esta vitamina es esencial para el organismo, por lo que si continúas el hábito de correr en invierno, el runner se asegurará la cuota diaria de esta vitamina.
Tips para tener en cuenta en invierno
Si bien correr en las jornadas de baja temperatura o en época invernal tiene sus ventajas, también tenemos que tener en cuenta determinados aspectos para que ello no se nos vuelva en contra:
- Hacer una entrada en calor con más tiempo. En épocas de bajas temperaturas, lo recomendable es dedicarle un tiempo mayor a los movimientos previos al entrenamiento. Si las temperaturas son muy bajas, se puede realizar en el interior del hogar. Al comenzar a correr se debe trotar de manera muy suave.
- Comenzar corriendo con viento en contra. En los días en que el viento es un factor importante, concluir con viento a favor nos permite economizar fuerzas.
- No demorarse al concluir la rutina. Al terminar de entrenar, se debe cambiar la ropa húmeda por prendas secas. De esta manera, evitaremos padecer el frío.