El hombre fue despedido tras cuarenta años de trabajo en la empresa y cuando ya estaba próximo a jubilarse. La víctima fue identificada como Ricardo Albornoz, era residente de Rosario de la Frontera, Salta y perdió la vida tras recibir el telegrama de despido.
Se especula que el estrés y la angustia causados por la noticia podrían haber desencadenado una reacción interna en el hombre, lo que llevó a su fallecimiento. El cuerpo de Albornoz fue encontrado por su esposa en el baño de su domicilio luego de recibir el telegrama de despido y dirigirse a ese lugar de su casa aduciendo un malestar.