Seis familias de este distrito rural de la ruta cinco de la ciudad Capital, padecen la falta de agua debido a un aberrante acto de vandalismo donde se robaron la bomba y los cables que impulsan el agua para el consumo de estas familias. Este equipo robado forma parte de una obra hidrica construida por el gobierno provincial. Hasta que se pueda reponer los elementos robados asistiran a los vecinos con camiones de agua.
El hecho fue detectado por los responsables de la distribución de agua en la zona ante el reclamo de los vecinos que alertaban del faltante de agua, quienes llegan al lugar y encuentran la escena con el equipo de bombeo robado y los cables de conexión cortados.
Los autores del robo sustrajeron junto con la bomba de impulsión de agua, alrededor de quince metros de los cables que se conectan con el equipo de bombeo y el correspondiente tablero de mando.
Ante esta situación, dieron alerta a las autoridades y se radicó la denuncia en la comisaría quinta, donde intervino el comisario Brizuela.
Según lo indicado por el jefe policial, el hecho ocurrió entre las 20 horas del día martes y las ocho de la mañana del miércoles, donde pudieron ver en el lugar huellas de movimiento de un vehículo interviniente con dirección hacia San Martín, junto a pisadas que se corresponderian con los presuntos malvivientes.
Una obra del gobierno provincial
El gobierno provincial tuvo intervención en esta zona construyendo una importante obra hídrica, que consta de la instalación de un reservorio de agua de 25.000 litros en la planta de El Quebracho, el cual se vincula con el equipo de bombeo robado para impulsar el agua a lo largo de siete kilómetros hasta el distrito rural El Rosario.
En este distrito rural viven seis familias que por este hecho de vandalismo se quedaron sin agua, para lo cual el gobierno provincial a través de la secretaría de Agua, implementó un operativo de agua con asistencia mediante camiones aguateros.