La Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires desea expresar su preocupación ante las afirmaciones vertidas por la Vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, en las que señaló que, durante su paso por esa casa de estudios, los estudiantes eran castigados con aplazos por expresar ideas divergentes, sugiriendo que era preferible “estar callados y mimetizados en la masa silenciosa”.
«Como institución pública con una rica tradición de compromiso con la democracia, el pensamiento crítico y el respeto por la pluralidad de opiniones, consideramos fundamental aclarar que la Facultad de Derecho de la UBA ha sido, y continúa siendo, un espacio de formación donde se promueve el debate libre y constructivo. Lejos de reprimir el pensamiento diferente, en nuestras aulas se fomenta activamente la participación de todos los estudiantes, asegurando un ambiente en el que prevalecen el diálogo y el respeto mutuo», expresaron desde la Facultad.
«Asimismo, queremos destacar el inestimable valor del claustro de profesores que, a lo largo de las décadas, ha sido pieza clave en la construcción de una facultad reconocida por su excelencia académica y su férrea defensa de los principios democráticos. Los docentes que integran nuestra institución, muchos de ellos con trayectorias académicas y profesionales de gran prestigio, se han dedicado con integridad y compromiso a la formación de generaciones de profesionales del Derecho, inculcando siempre el valor de la argumentación fundamentada y el respeto a la diversidad de ideas», continuaron.
«La Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires es un faro de conocimiento y libertad, donde el intercambio de opiniones y el espíritu crítico son valores esenciales que guían nuestro quehacer académico. Rechazamos categóricamente cualquier intento de deslegitimar la calidad de nuestra enseñanza o sugerir que en esta casa de estudios se penaliza el pensamiento independiente», establecieron en el contundente comunicado.
Finalmente, aseguraron que «en un contexto como el actual, en el que la convivencia democrática se vuelve cada vez más necesaria, reiteramos nuestro compromiso inquebrantable con la formación de profesionales libres, críticos y comprometidos con el estado de derecho, las instituciones y los valores democráticos y republicanos que definen a nuestra sociedad».
Para Villarruel, educar con «panfletos e ideología» esconde un intento por «lavar cerebros»
Así lo expresó en una disertación sobre educación en el Senado, en vísperas del veto al presupuesto universitario por parte de Milei.
A pocos días de que el Gobierno anunciara el veto total de la ley que actualiza y blinda el presupuesto universitario, la vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, afirmó este martes en el Día del Profesor que los intentos por «asfixiar» la educación con «panfletos e ideología» buscan «lavar cerebros» y la imposición de una única visión del mundo.
Fue durante una disertación sobre educación en el Salón Azul del Senado, en la que cargó también contra el vicerrector de la Universidad de Buenos Aires, Emiliano Yacobitti, una de las espada principales de la Unión Cívica Radical en el ámbito de las casas de altos estudios porteñas.
«Cualquier intento de asfixiarla con panfletos e ideología esconde el intento de lavar cerebros, de imponer una única visión del mundo. Suele decirse que la moral de un Gobierno se mide por la forma en la que trata a sus niños y jóvenes», lanzó Villarruel en el encuentro organizado con motivo del Día del Profesor, que se celebra cada 17 septiembre.
En esa línea, la titular de la Cámara alta continuó: «Para nosotros, educar políticamente es un acto de cobardía, un crimen que se comete contra la última esperanza que tiene nuestra Patria, y que es su juventud. La educación tiene que formar la fibra moral del individuo, no su adaptabilidad para el valor político de turno».
Para Villarruel, se educa para «formar autómatas o personas vacías de libre albedrío» ni tampoco para «seres que protegen la ideología de sus amos». «Educamos para crear argentinos libres, que estén formados para pelear por lo que es justo, que griten ante las injusticias y luchen por la verdad», resaltó.
Días atrás, Yacobitti cargó contra el presidente Javier Milei al sostener que varios de sus funcionarios fueron formados en universidades públicas: «La muestra es que tu ‘megaministro’ de Economía, tu ‘Maradona de las finanzas’, viene de la UBA (en referencia a Luis Caputo) y (Federico) Sturzenegger de la Universidad de La Plata».
«Ahí también la universidad tiene un problema. Vos no podés formar a tu verdugo. Tiene un problema también… no solamente tenés que formar buenos profesionales», lanzó el radical de la línea Evolución, de relación estrecha con el senador y presidente del Comité Nacional de la UCR, Martín Lousteau.
Villarruel citó a José Manuel Estrada, profesor y ex diputado, ligado al catolicismo, al sostener que se «educa cuando se fomenta la capacidad de pensar por cuenta propia» y volvió a la carga contra Yacobitti: «Hace pocos días, una importante autoridad de la Universidad de Buenos Aires, sostuvo que “la universidad pública tiene que trabajar en el perfil político de sus graduados».
«Esta frase condensa el mayor problema que tiene actualmente la educación de los argentinos. Durante décadas se ha hecho un esfuerzo inusitado por parte de una élite universitaria para penetrar las mentes de los estudiantes, pervirtiendo la voluntad de aquellos que deberían estar formándose para aportar su saber a la Patria», arremetió Villarruel.
Del encuentro, que inició pasadas las 18:00 disertaron también el rector de la Universidad Católica Argentina (UCA), Miguel Ángel Schiavone; el director educativo de la escuela técnica ORT Argentina, Alejandro Ferrari; y la profesora y directora de la escuela secundaria 7 de Chascomús, Silvina Mengarelli.
NA