“Muchos docentes están dejando de dar algunas horas para dictarlas en la Ciudad de Buenos Aires o en Provincia de Buenos Aires, porque con la diferencia que hubo de actualización salarial, allí están cobrando el 30% más», sostuvo el vicerrector de la UBA, Emiliano Yacobitti.
Luego del pedido a los senadores para aprobar la Ley de Financiamiento Universitario por parte del Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires, distintos sectores de esta casa de altos estudios se hicieron eco del reclamo. La aprobación de esta Ley es fundamental para continuar con el correcto funcionamiento de todas las universidades públicas del país.
El vicerrector de la UBA Emiliano Yacobitti manifestó al respecto que “la responsabilidad en este caso ya no es del presidente de la Nación, sino de la Cámara de Diputados, que ya le dio media sanción, y los senadores, que sesionarán este jueves 12. Necesitamos que voten la ley para actualizar los salarios de los profesores universitarios, porque la situación es verdaderamente preocupante”.
Y agregó: “Muchos docentes están dejando de dar algunas horas para dictarlas en la Ciudad de Buenos Aires o en Provincia de Buenos Aires, porque con la diferencia que hubo de actualización salarial, allí están cobrando el 30% más. Eso es algo que nunca pasó, el poder adquisitivo de un profesor universitario, que ya de por sí no tenía un buen salario, bajó entre un 35 y un 55 por ciento en ocho meses”.
Según Piera Fernández de Piccoli, presidenta de la Federación Universitaria Argentina, “tenemos que poner toda la energía desde el sistema universitario en conjunto en la próxima sesión del próximo jueves en el Senado de la Nación. Necesitamos la aprobación de la Ley de Financiamiento Universitario y generar el apoyo de toda la sociedad como lo tuvimos el pasado 23 de abril. Esta es una ley que viene a reparar el gran ahogamiento al que el gobierno nacional ha sometido a la universidad pública desde el inicio de su gestión”.
Por su parte, Jorge Anró, secretario adjunto de la Federación Argentina de Trabajadores de las Universidades Nacionales (FATUN) que agrupa a los nodocentes, aseguró que “después de 9 meses que intentamos con este gobierno buscar todo tipo de diálogo y no haber encontrado ningún tipo de respuesta para la situación salarial docente y nodocente, creemos que el único camino posible es que el Congreso de la Nación, otro de los poderes del Estado, nos dé una respuesta. Por eso estamos apoyando firmemente el proyecto de Ley que aprobó diputados y que esta semana va a tratar la cámara de senadores. Creemos que es el principio de una solución para la universidad pública y en caso que el poder ejecutivo vete la ley, insistiremos con el Congreso. Tendremos que movilizarnos, seguir con la lucha y conseguir los dos tercios necesarios”.
Y concluyó: “La lucha por defender a la universidad es la lucha por el futuro de nuestro país, el desarrollo de la Argentina, la ciencia, la tecnología, la educación, la extensión, todo lo que la universidad pública le brinda a la sociedad. Destruir a la universidad pública es destruir el futuro de nuestros hijos”.
En tanto, Emiliano Cagnacci, secretario general de la Asociación Docentes de la UBA, enfatizó que lo que el Gobierno Nacional lleva adelante “es un plan de ahogo sistemático de las universidades públicas de todo el país más que una política de ajuste salarial. Está claro que las casas de estudio nacionales no pueden operar con salarios que en muchos casos no llegan ni a la línea de pobreza. Por eso exhortamos a las y los senadores para que aprueben de manera urgente la Ley de Financiamiento Universitario que ya fue aprobada por los diputados”.