Desde algunos sectores del PJ se propicia a un mandatario provincial para encabezar al movimiento en el próximo período. La apuesta es por una «mesa política horizontal» que defina una estrategia ante el reciente gobierno de Javier Milei.
Sectores del peronismo impulsan la figura de un gobernador para encabezar el PJ en el próximo período, como parte del intento por poner en marcha una «mesa política horizontal» que defina la estrategia opositora del espacio ante el Gobierno de Javier Milei.
Así lo dejaron entrever en las últimas horas distintos referentes del Justicialismo, que buscan asimilar su nuevo rol opositor en el mapa político nacional y consagrar nuevos liderazgos para la etapa que inicia.
Diversas fuentes consultadas por Télam indicaron que «hay voluntad de distintos sectores» para promover una renovación en las filas del PJ, aunque aclararon que todavía «no hay nada firme» de manera formal.
El puntapié inicial lo había dado el martes el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, al proponer una «amnistía» para reunir a los referentes de distintos sectores en una «gran mesa horizontal» con «gobernadores, legisladores nacionales, la CGT y los movimientos sociales», de modo tal de coordinar acciones de oposición ante medidas que consideran «regresivas», como el DNU de desregulación económica y numerosos puntos de la ley ómnibus del oficialismo.
En materia partidaria, esa intención de renovación alcanzaría a la figura del expresidente Alberto Fernández, que actualmente es el titular del PJ nacional y se encuentra en Madrid con su familia.
Fuentes del peronismo señalaron a Télam que una de las posibilidades es que «un gobernador tome la presidencia» del Consejo Nacional del PJ, lo que requeriría convocar a la Mesa de Acción Política de esa fuerza y definir los pasos a seguir en virtud de que Fernández tiene mandato hasta abril de 2025.
A la hora de evaluar los nombres en danza, las fuentes señalaron que el mandatario bonaerense, Axel Kicillof, observado por distintos sectores como un posible referente, no tendría la «vocación» de conducir al PJ nacional, lo que pondría en carrera al resto de los mandatarios justicialistas.
«Se está convocando a la unidad y el peronismo necesita una cabeza», subrayaron las fuentes consultadas.
Otra figura que podría sumar acciones en esta etapa de reconfiguración es la del exministro de Economía y excandidato presidencial Sergio Massa, líder del Frente Renovador pero a quien distintos referentes del PJ quieren incorporar a la discusión partidaria.
Por lo pronto, el peronismo acordó desplegar en varios frentes su estrategia opositora ante lo que advierte como un «avasallamiento» de leyes por parte del Gobierno de La Libertad Avanza (LLA).
Así, «los que tienen responsabilidades de Gobierno harán reclamos en la Justicia, y los legisladores harán lo propio en el Congreso y en los medios», según explicó a esta agencia una fuente del Justicialismo.
De ese modo actuaron Quintela, que en los últimos días recurrió a la Corte Suprema para solicitar la suspensión del DNU, y la CGT, que logró que la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo habilitara la feria judicial para sacar una cautelar contra el segmento laboral de ese mismo decreto.
En el capítulo bonaerense de la discusión interna, algunos sectores del peronismo impulsan una renovación que trascienda la conducción de Máximo Kirchner, referente de La Cámpora y actual titular del espacio en ese distrito, mientras Kicillof sumaría el apoyo de intendentes no sólo del PJ sino también del «vecinalismo», encarnado, entre otros, por el chivilcoyano Guillermo Britos.